A Benedetto no le salió una, pero no cayó en lamentos y felicitó a Tigre
“Las posibilidades desperdiciadas nos costaron, pero cuando no es, no es”, dijo el delantero.
El 2019 de Darío Benedetto viene mal. Muy torcido. Y anoche en Córdoba confirmó que su presente no es el mejor. Es que Pipa, implacable desde sus estadísticas en el club con registros similares a los de Martín Palermo, falló todo
lo que tuvo. Y no fue poco. Media docena de situaciones de gol, con distintos matices y definiciones. Posibilidades claras para resolver el partido, para empezar a ganarlo, para empatarlo e incluso descontarlo. Nada le salió.
El palo izquierdo en el primer tiempo, las manos de Gonzalo Marinelli en el segundo, el travesaño luego de un cabezazo claro tras un salto fenomenal y una increíble ineficacia con otra definición de cabeza en el área chica hicieron que Benedetto no pudiera cortar con una racha negra que lo acompaña desde el partido con Deportes Tolima por la Copa Libertadores. Es que desde el 24 de abril que el 9 no convierte y aquel último festejo fue de penal.
En 2019, Benedetto metió 5 goles (3 fueron desde los doce pasos) en 20 partidos disputados. Ya superó los 475 minutos sin dejar su huella en la red, pese a tener muchas oportunidades en los últimos juegos. Y por eso se fue del Mario Kempes pidiéndole
disculpas a sus hinchas, a quienes les llenó la boca de goles durante buena parte de 2017 y 2018.
“Hay cosas que corregir, pero la garra y los huevos que le puso el equipo a este torneo marcan que estamos haciendo las cosas bien. Llevamos muchos partidos más que el resto, hay cosas para corregir y lo haremos durante la pretemporada para estar listos para lo que se viene”, reflejó el delantero en una jornada en la que buscó de todas las maneras posibles, pero expuso una falla atrás de otra a la hora de la definición.
“Son posibilidades desperdiciadas que después nos costaron. Es un resultado que no sé si llamarlo injusto, pero creo que en el primer tiempo tuvimos nuestras oportunidades y no
las aprovechamos. Estábamos jugando bien, creando situaciones, una fue al palo, la otra al travesaño... Pero cuando no es, no es. Solo me queda felicitar a Tigre, porque es uno de los mejores del fútbol argentino, más allá de que le tocó descender por el promedio”, se lamentó, con altura, Benedetto, quien hace poco actualizó su vínculo con el club y prometió quedarse hasta diciembre pese a que tiene sondeos de clubes del exterior para emigrar.
¿Qué dijo Gustavo Alfaro sobre Benedetto? “Darío me dijo en el vestuario que si las jugadas que erró las hubiese intentado cancherear, quizá se sentiría peor por fallarlas. Pero las fue a buscar todas de la manera que tenía que hacerlo y en algunas ni siquiera eligió mal en la definición. A veces el gol depende de dos cosas: la fe en la búsqueda y la definición”, respondió el entrenador.
Sabe que tendrá que recuperarlo más desde lo anímico que desde lo futbolístico para lo que se viene en la segunda parte del año. “Cuando Benedetto pueda tener la serenidad para definir, se le va a volver a abrir el arco, como le pasó hace un tiempo con esta camiseta”, fue una mezcla de deseo y análisis del técnico.
La voz de Carlos Tevez también dejó una sensación ambigua sobre el resultado de la final ante Tigre. “Pipa está pasando por una sequía y lamentablemente le tocó en un momento en que lo necesitábamos. En estos últimos partidos nos costó meter goles. Y cuando los errás, te los hacen”, describió el capitán en la noche de Córdoba. La cara suya fue la misma que la del resto. Una mezcla de enojo por no conseguir el título y también de calma por haber mostrado una imagen a la altura de lo que representa una final con la camiseta de Boca. Ahora, vacaciones hasta los octavos de final de la Libertadores. w