China entra al mercado local con productos de bajo costo y alto desempeño, como vagones de tren.
El 22 de mayo pasado, en el puerto de Buenos Aires, 72 vagones de tren captaron la atención de propios y extraños. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner y el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, presentaron los coches nuevos adquiridos al gobierno de China para la renovación de la neurálgica Línea Sarmiento, que une el centro de esta capital con una amplia región de la periferia oeste.
A medida que avanza la política local de reestructuración del sistema ferroviario urbano en la Argentina, los trenes y equipos de fabricación china han ganado la aprobación del gobierno argentino. En los últimos dos años, las empresas chinas CSR Corporation Ltd., CNR Corporation Ltd., China Machinery & Equipment Import and Export Company entraron al mercado local con tecnologías confiables y productos con alto desempeño y bajo costo. Con esto, obtuvieron importantes contratos gubernamentales para la mejora del sistema ferroviario argentino.
Sin embargo, la llegada de esos equipos supone una mínima parte del aumento constante del intercambio comercial entre ambos países, que establecieron vínculos diplomáticos en 1972.
En la actualidad, China es el segundo socio comercial de la Argentina, el primer mercado de destino de productos agrícolas y el tercer inversor en el país latinoamericano. El dinamismo en la exploración del espacio comercial depende y, a la vez, se potencia a partir de las características complementarias de las economías de los dos países. Una muestra ha sido el establecimiento por parte de Biogénesis Bagó de una base de producción de vacunas contra la fiebre aftosa en China. π