Pensamientos negativos
Guía práctica para eliminar y reconocer a estos enemigos que atentan contra la calidad de vida.
Los pensamientos negativos, recurrentes, pueden perseguirnos y empañar nuestra vida, sin embargo no son fantasmas imposibles de combatir. Más allá de las situaciones que los originan, con frecuencia admiten razones que fácilmente se podrían eliminar con tomar un poco de conciencia y desear mejorar nuestra calidad de vida. Algunos motivos que pueden desencadenarlos: - Fisiológicos. A menudo, los pensamientos negativos pueden surgir por problemas de circulación por no practicar ejercicio físico o yoga.
-Respiración inadecuada. Tener insuficiente suministro de oxígeno al cerebro puede afectar negativamente a la mente.
-Problemas “energéticos”. La mente puede estar pesada y negativa debido al nivel de energía que fluye en el organismo. Cuando la ener
gía vital ( Prana, en sánscrito, o
Chi o qui, en chino y japonés) está baja, los pensamientos se ponen oscuros y negativos. En estos casos, conviene observar las fuentes que da la naturaleza para elevar la energía. Esto incluye: -La alimentación -El descanso -La respiración -El estado feliz de la mente De estas cuatro, la respiración es la que más desconocemos y más secretos encierra.
Salidas posibles Una vez identificado el motivo, la solución está en nuestras manos. -Para mejorar la circulación, el ejercicio físico ayuda inmediatamente. Hacer estiramientos o yoga al levantarse es ideal para los que no aman moverse. Practicar algún deporte como natación, tenis, fútbol o correr, por ejemplo, también es excelente. Muchos ignoran que cantar y bailar mejora la circulación y eleva la energía. “Meditar regularmente y practicar pranayamas ayuda a que todo esto fluya y a tener una mente ágil, serena y centrada”, asegura Sri Sri Ravi Shankar, fundador de El Arte de Vivir. -De acuerdo a esta filosofía, cuidar nuestro cuerpo implica comer sano y hacer alguna limpieza profunda del intestino e hígado, una o dos veces al año, bajo la supervisión de un profesional. Algunas limpiezas incluyen beber agua en grandes cantidades junto a una serie de ejercicios. Es una práctica simple e inócua, que debe ser monitoreada por expertos. El agua limpia el cuerpo, eliminando las toxinas e impurezas del organismo. Realizar una dieta a base de frutas y verduras -que favorezca la digestión- también ayuda a tener claridad de pensamiento. -Finalmente, buscar buenas compañías, gente alegre, con ganas de compartir cosas hermosas y que tengan enfoques sanos y positivos de la vida. Las malas compañías también puede bajar la energía. -Si a pesar de seguir estas observaciones, los pensamientos negativos continúan, hay que tener en cuenta que así como vienen se van. No importa. No hay que dedicarle tanta atención. Si se les teme, estos pensamientos permanecerán. Si no se les teme, los pensamientos fluyen, “salen”, se van. La oración y la meditación también son herramientas para ahuyentarlos. Dice Sri Sri Ravi Shankar: “Si meditás, tus pensamientos se refrescan, se renuevan”. Meditar, sonreír, ser feliz y hacer feliz. *Beatriz V. Goyoaga es instructora de meditación y respiración, coordinadora para Latinoamérica y España de El Arte de Vivir, donde trabaja como voluntaria desde hace 17 años.