Gloria Audo
Artista plástica
Es socióloga y con solo nueve años, se volcó a la pintura. A los 25, empezó a exponer sus obras en muestras colectivas e individuales, en el país y en el exterior. Enseñar era una materia pendiente, hasta que hace 15 años, en su casona de San Telmo, llena de magia y de misterios, convocó a entusiastas del arte a sumarse a sus talleres. “Vienen desde niños de cuatro años hasta adultos de 82. Ellos buscan una salida más humana a su propia vida. El arte es uno de los últimos territorios que le queda al ser humano para ejercer la libertad -explica, rodeada de muchas de sus pinturas y un piano de cola-. El arte abre ventanas, la mente y el corazón”. Gloria fundó “San Telmo Art Group”, desde donde ofrece charlas y conferencias y nueve eventos por año, que incluyen exposiciones en universidades, centros culturales, su taller y clubes de barrio. A sus clases, concurren contadores, periodistas, bancarios, arquitectos y también jubilados y amas de casa que “que pintan maravillosamente bien”, dice Audo. “Yo propongo trabajar en óleo, témpera, acuarelas, carbonilla, lápiz y pasteles -confía la maestra-. No importa que no sepan pintar ni dibujar. Lo único importante es que tengan ganas de aprender. Les enseño a mirar, a educar el ojo, y de ahí que liberen su cabeza y pinten lo que más les guste”. El arte corre por sus venas