Ahora, a no “mandar fruta”
El líder mundial de herbicidas de Bayer estuvo en el país con la mira puesta en los cultivos de frutales.
Los productores luchan día a día con todo tipo de insectos, hongos y malezas que atacan sus lotes, afectando la productividad de sus cultivos, y durante el último tiempo se ha puesto en evidencia que ya no es suficiente con la aplicación de un solo producto y un único manejo, sino que es necesario contar con un plan integral. Pero esta nueva realidad trae consigo la necesidad de realizar inversiones y adaptar la estrategia a los requerimientos de cada productor.
En los frutales de pepita, carozos, cítricos, arándanos, uva, pera y almendra, entre otros, hay casos en los que se aplica glifosato hasta 7 veces por campaña y, específicamente en citrus, el 70% de los productores aplican solamente este herbicida para combatir malezas de distinto tipo, pero sin conseguir los buenos resultados que se obtenían en años anteriores.
En este contexto, recientemente estuvo en Argentina Joerg Oeser, manager global de Herbicidas de Bayer CropScience, para el lanzamiento del nuevo herbicida Alion, cuyo componente principal es el Indaziflam y tiene un modo de acción que inhibe la biosíntesis de celulosa, lo que se traduce en un mejor control de malezas resistentes y tolerantes a los herbicidas tradicionales.
“Este producto pre-emergente está presente en otras partes del mundo y ahora lo trajimos a Argentina, un país clave para nosotros. Hicimos ensayos en las zonas de cultivos frutales del país con excelentes resultados. Su nivel de residualidad es de 90 días, el mayor del mercado, pero puede aumentar considerablemente dependiendo de las condiciones climáticas, en algunas casos hasta un año”, indicó el especialista.