La creatividad es lo que hace la diferencia
En una conferencia, se destacó que la capacidad de innovar es decisiva para las empresas del agro.
Al momento de diagramar su actividad, los productores agropecuarios deben enfrentarse a una multiplicidad de factores ambientales, económicos y políticos. Así, en un lapso de tiempo relativamente breve deben tomar decisiones en un amplio rango: desde que semilla usar de acuerdo al tipo de ambiente, que productos aplicar y en qué momento, sin dejar de mirar los valores de los insumos, el vaivén de los precios internacionales y el escenario político nacional.
Al conocimiento que el productor adquiere a través de los años, a ese invaluable know how ganado en base a esfuerzo, estudio y una elevada dosis de ensayo y error, la creatividad puede sumar varios puntos. Y en este contexto cabe preguntarse: ¿qué es ser creativo? En una primera instancia, se asocia esta virtud con la capacidad, por ejemplo, de crear una obra artística, ser un deportista habilidoso y muchas otras variables de esta “creatividad”.
Pero Estanislao Bachrach, doctor en biología molecular y máster en dirección de empresas, va un paso más allá y enriquece este concepto. Para el especialista, ser creativo es saber afrontar situaciones imprevistas con las herramientas disponibles, una idea que calza a la perfección en el marco de la actividad agropecuaria y empresarial.
Entre los ejecutivos de diversas empresas, Bachrach explicó que es común la demanda de gente “creativa”. O en otras palabras, algo tan simple y complejo a la vez, como recursos humanos capacitados para ofrecer algo nuevo y que a su vez agregue valor. “Estamos en la era conceptual y quienes empiezan a marcar diferencias son los creativos”, remarcó.
En un mundo en donde la tec- nología marca el ritmo de los avances, el especialista remarcó que una de las claves para estimular la creatividad pasa por no quedarse quieto. Desde su perspectiva, hay que ser dinámico y adaptarse al ambiente, que se mueve constantemente, para así motorizar un cambio positivo con mucha interacción.
Este factor es fundamental para convertir el ambiente de trabajo en una usina de ideas, tanto en las oficinas de una empresa como en el trabajo diario en un establecimiento agropecuario. “En el trabajo, el cerebro se conecta y reconecta”, sostuvo.
Y si bien incorporar cambios en el esquema cotidiano de trabajo es una tarea compleja, el especialista recomienda instalar este proceso de manera paulatina, en un marco de consenso y comunicando las ideas de manera clara y concisa.
A estos conceptos, se suma la idea de generar alternativas para acceder a la educación, para añadir otra puerta de acceso al proceso de creatividad positiva. En este punto, el físico y docente Daniel Córdoba, que tiene a su cargo el curso “La Física al alcance de todos”, orientado a alumnos del nivel secundario en la provincia de Salta, es un claro ejemplo de cómo generar motivación a través de herramientas que podrían considerarse poco ortodoxas.
El punto de partida de este docente es generar ganas de aprender y estimular la vocación por el estudio de carreras vinculadas a las ciencias exactas, a través de la Física. Muchos de los alumnos de este particular docente en la actualidad cursan sus estudios en el prestigioso Instituto Balseiro, ubicado en Bariloche.
Por su parte, y para fortalecer esta idea de creatividad positiva y aportar un punto de vista más vinculado a la reflexión, el psicólogo Miguel Espeche, que tiene a su cargo la coordinación general del Programa de Salud Mental Barrial del Hospital Pirovano, resaltó que las personas deben aprender a aceptar su entorno cotidiano, para de esta manera fortalecer sus potencialidades.
Queda claro entonces, que la creatividad frente a situaciones imprevistas es una herramienta que permite, tanto a productores como empresarios, salir airosos en situaciones difíciles. t