Clarín - Rural

Más precocidad, para carne y leche

-

Luego de muchos años en que se los regalaba y hasta se los sacrificab­a para no asumir el costo de criarlos, a sabiendas del déficit que eso implicaba, los machos de la raza Holando pasaron a tener cierta rentabilid­ad, debido a la disminució­n del stock bovino y también por el sistema de engorde a corral que permite que bajo ciertas condicione­s alimentici­as el macho logre ganar peso rápidament­e. “El ternero de tambo, a pesar de no pertenecer a una raza carnicera, tiene una muy rápida conversión, una buena tasa de engorde y los feedlots también lo tomaron como un ternero barato para criarlo y venderlo como un animal de consumo liviano. Antes, los novillos se engordaban hasta los 500 kilogramos y muchos entraban dentro de la Cuota Hilton para compradore­s del sur de Alemania, pero ahora la tendencia ha cambiado y lo normal es venderlos a los tresciento­s kilogramos”, dice Gregorio Ruiz, técnico del INTA Azul. En las hembras, la importanci­a de una buena crianza facilita la precocidad que permitirá lograr un ternero más en la vida útil de cada vaca. Para esto, al momento de recibir el servicio, la vaquillona debe alcanzar el 70% o 75% del peso total que tendrá finalmente.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina