Aapresid busca achicar la brecha en los rendimientos
La regional de Bragado ya trabaja sobre los potenciales
La producción requiere de permanente actualización, para que no cese el desarrollo.
Así lo manifestó Bernardo Romano, presidente de la regional Bragado-Chivilcoy de Aapresid, durante la jornada “Desafíos para seguir produciendo de forma sustentable económica, social y ambientalmente”, que organizó su filial, en la que se trataron temas claves como la brecha entre los rindes potenciales y los que efectivamente se logran, las malezas resistentes y, también, la deficitaria sustentabilidad del sistema agrícola argentino actual.
Tomas Coyos, miembro de equipo del Sistema Chacras, de Aapresid, explicó que crearán una chacra en la zona para trabajar intensamente sobre cómo “achicar la brecha que existe entre el potencial de rendimiento y los rendimientos obtenidos, viendo por qué se produce”.
En esa línea, Gustavo Ferraris, especialista en nutrición vegetal del INTA Pergamino, hizo su aporte hablando sobre maíz y soja, para concluir que es necesario hacer un adecuado manejo nutricional para lograr los rendimientos potenciales.
Ferraris explicó que a medida que se intensifica la producción se aumenta el porcentaje del aporte y que los dobles cultivos son la mejor opción en una secuencia conservacionista. Entre esos dobles cultivos siempre tiene que estar presente el maíz, agregó.
Otra de las cuestiones asociadas al manejo sustentable, y muy presente en el debate actual, es el manejo de malezas.
Al respecto, Delma Faccini, de la cátedra de Malezas de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Nacional de Rosario se refirió a la importancia de conocer aspectos de su biología y ecología de las especies.
Faccini recordó que las malezas tienen aspectos negativos pero también positivos dentro del agroecosistema. Entre éstos últimos citó a las especies que hay en los bordes de los campos, ya que un borde totalmente limpio puede ser nicho para el ingreso de especies problema, indicó.
A su turno, Diego Ustarroz, de INTA Manfredi, dio consejos para el manejo de especies problemáticas de la zona central del país.
El sorgo de Alepo resistente a glifosato se ha diseminado por toda la región y sigue en expansión. Para Ustarroz, hay que controlarlo cuando alcanza los 40 centímetros de altura, porque es ahí cuando la planta se encuentra con la mejor relación entre biomasa aérea y subterránea.
En cuanto a las especies que se transformaron en más problemáticas en los últimos tiempos, el técnico mencionó a la Gomphrena pulchella, que debe tratarse con desecantes en estadios tempranos y darle mucha importancia a la aplicación de herbicidas preemergentes, ya que muchos de ellos funcionan muy bien para evitar su germinación.
Otra es Borreria, que tiene un manejo más complejo que Gomphrena. Hasta el momento, explicó Ustarroz, no se ha encontrado un manejo que vaya más allá de la aplicación de desecantes, pero el rebrote se produce a los 15 días de la aplicación.
Por otra parte, a la tecnología y a la innovación, hay que conducirlas. Para esto sirven de César Belloso, presidente de Aapresid. “Hay que construir líderes que entiendan sus fortalezas, sus debilidades, sus valores, apuesten a innovar confiadamente, adaptándose a un mundo cambiante y llevando adelante una actitud positiva”, dijo el Belloso. t