De rumores y devaluaciones
Mientras el clima en la Argentina se acerca al ideal para los cultivos de la cosecha gruesa, salvo en el NOA, donde sigue sin llover, los valores de los granos no experimentaron mayores cambios esta semana. Ocurre que al supuesto aumento de la producción y la oferta, en el corto plazo, se le enfrentó una demanda que continúa ávida de mercadería y sostuvo los precios de compra.
En tanto, la producción de soja sigue sin vender volúmenes de importancia, cuando hay unos 12 millones de toneladas sin negociar, a la espera de tener colocación para los pesos producto de esas ventas. Los rumores de una baja de 10 puntos en las retenciones de la oleaginosa que se embarque en diciembre no fueron tomados muy en serio por los operadores, pero sí por los productores. Esta versión se suma a la realidad de las devaluaciones diarias como para no hacer muy atractiva la venta, cuando todos los días existen mejores condiciones de colocación. El rumor de la baja de retenciones corría el jueves en el mercado de Chicago. De una cosa están seguros los vendedores: no deben quedarse con pesos en sus bolsillos. Todo esto más allá del consejo del jefe de gabinete, asegurando que la soja bajará 20 dólares. La oleaginosa realmente tiene un “inverse” de 40 dólares entre los 340 de diciembre y los 300 de mayo. Esto es bastante típico en esta época del año. El año pasado fue de hasta 70 dólares.
La expor exportación de trigo, si bien no está “desesperada” “de por comprar, prar, pretendíandía pretend ir cubriendo ventas tas anteriores anterioress y y, al cierre, se negociaba ciaba a 1.450 co conon ppago inmediato. La molinería seg seguíaegu comprando partidas chicas chicas,icas, a la espera del grueso gruesoo de l la cosecosecha y de que el produ productor venda. Esta semana el Minagri reconfirm su estimación de la cosecha en 8,58 millones de toneladas, mientrasmientr que la Bolsa de Bahía Blanca la fijaba en 8,8 millones y la Bolsa de Cereales de Buenos Aires manteníama los 10,3 millones.ill El volumenl definitivo dará el rumbo al mercado.
En Chicago, el mercado de maíz norteamericano operaba con cierta pesadez, mientras las exportaciones resultaban magras y China rechazaba algunos cargos del forrajero. La industria de etanol salvaba las papas y no dejaba caer mucho más las cotizaciones. t