Tendiendo puentes
Un grupo de empresarios del agro argentino viajó hasta China para conocer, de primera mano, cuál es la demanda tecnológica que tiene el “gigante”. Allí visitaron varias ferias agrícolas y regresaron con nuevas oportunidades de negocios para el futuro.
Al otro lado del mundo hay un gigante: China. La influencia de su economía es global y se está convirtiendo en la mayor del mundo. Sin embargo, en el sector agropecuario se genera la energía que impulsa el progreso de esa potencia. Debido a esto, algunos países de raigambre agrícola-ganadera, como la Argentina, quieren aprovechar las oportunidades que brinda este gran país de oriente.
De un viaje de negocios organizado recientemente a China, del que participaron representantes de empresas agropecuarias de distintos rubros (Ver La visión ...), todos ellos regresaron con una idea clara: se despertó esta gran economía y ninguno puede asegurar hasta dónde llegará la onda expansiva de su creciente desarrollo.
Las ciudades chinas están taponadas de autos nuevos (antes eran bicicletas y luego motos), grandes autopistas, edificios inmensos que van desplazando a otros de menor valor, grúas y trépanos que en algunos lugares superan largamente la veintena trabajando.
Luego de Mao, los gobernantes
La feria de Wuhan tiene 200.000 metros cuadrados y 1.600 expositores
iniciaron la salida del comunismo y, aparentemente, no piensan volver a él. Así lo aseguró Jin, el guía de la delegación argentina, nacido en Beijing, hace unos cuarenta años. Sus abuelos sufrieron hambre y no tuvieron casa dónde vivir, sus hijos tuvieron heladera, los nietos tienen auto.
“Este cambio fue un terremoto mental, como un Tsunami”, sostuvo Jin. El desarrollo evidencia que hoy en China hay, al menos, diez ciudades con diez millones de habitantes y todas semejantes, ediliciamente, a New York (EE.UU.).
Con una infraestructura notable, en esas ciudades el problema de la contaminación del aire también lo es (la mayor parte del tiempo el sol es pálido y la luna roja) y, al respecto, no se sabe si gobierno chino hará algo. La dinámica poblacional china muestra que la gente de mayor edad se queda en el campo y, en la medida que se van generando oportunidades, a nivel agropecuario se unen pequeñas superficies de campo a fin de formar establecimientos de mayor escala.
De esta forma se generará la nueva ingeniería agropecuaria china que demandará más infraestructura, equipos y tecnología.
Para conocer de primera mano la demanda tecnológica china, los empresarios argentinos que fueron parte de la comitiva visitaron, entre otras ferias, a la China International Agricultural Machinary Exhibition (CIAME), una exposición de la asociación de distribuidores de maquinaria agrícola china.
Esta feria, que se realiza en la ciudad Wuhan, capital de la provincia de Hubei, la ciudad más poblada en la zona central del país, ofrece dos ediciones anuales, una de otoño y otra de primavera. La edición de otoño (llamada China International Agricultural Machinery Exhibition) fue visitada por los empresarios argentinos. Esta expo se hace en una superficie 200.000 metros cuadrados y participan entre 1.600 a 1.800 expositores, entre empresas pequeñas, medianas, grandes y multinacionales.
Allí, los argentinos se reunieron con el señor Chen Tao, vice -presidente de la China Agricultural Machinery Distribution Association y presidente de la Beijing Huibang Hanwei Exhibition & Display.
El directivo explicó que éste es el momento de establecer empresas en su país y, como prueba de ello, comentó los casos de los países europeos más industrializados que llegaron hasta allí con fábricas de cosechadoras, tractores y maquinaria agrícola. En la recorrida, los productos chinos de esas marcas multinacionales pudieron verse en la exposición del Wuhan International Expo Center.
En ese momento, los empresarios argentinos tuvieron la oportunidad de establecer contactos y sellar definitivamente acuerdos con los chinos, como fue el caso del convenio de colaboración estratégica firmado entre la santafesina Apache y Shandong Changlin Machinery Group para la fabricación de maquinaria con diseño, además del “el know how” que la firma argentina le aportará los técnicos chinos.
Shandong Changlin Machinery Group (SCMG) es una de las más importantes empresas de maquinaria de la República Popular establecida en la ciudad de Linyi, provincia de Shandong.
Hasta allí voló Carlos Castellani,
titular de Apache, desde donde se encontraba la misión ICBC-Expoagro, para firmar el acuerdo en las oficinas centrales de Chanling.
Dos días le llevó la tarea al directivo, previamente iniciada en Las Parejas, en Santa Fe. Concretado el acuerdo y ya de regreso en el seno de la misión, Castellani agradeció a la misión la oportunidad de haber podido concretar tan importante iniciativa.
“En Chanling trabajan 5.200 empleados y la firma del joint venture es el inicio de una etapa más que auspiciosa para ambas empresas: Apache aportará su know how en diseño maquinaria agrícola para el mercado chino, con específicas características para satisfacer a la agricultura de este país”, contó el directivo y concluyó afirmando que este mercado es el sueño de todo fabricante de maquinaria agrícola, con crecimiento anual de entre el 10% y 30% anual.
Al respecto, Chen Tao, gerente de la Asociación de distribuidores de maquinaria agrícola de China, explicó: “Es importante saber en cuál región de China se ofrece buen marco para operar y contar para ello con un socio local”.