En la búsqueda de la eficiencia
El primer congreso de nanotecnología unió en Buenos Aires a expertos de EE.UU., la UE, Brasil y Argentina.
Hace pocos días se llevaron a cabo en Buenos Aires las Jornadas Internacionales de Nanotecnología, organizadas por el INTI y el INTA, durante las cuales profesionales de distintos países, como Brasil, la Unión Europea , EE.UU. y Argentina, contaron las novedades en la materia, particularmente las vinculadas a la agroin- dustria y los alimentos.
La nanotecnología es una disciplina que se encarga del control y compresión de la materia a escalas nanométricas. Un nanómetro equivale a 0,0001 micrón. En ese tamaño, la materia presenta propiedades físicas y químicas únicas, que permiten aplicaciones y resultados muy diferentes a las tradicionales.
En el agro, las formulaciones de agroquímicos en base a nanotecnología constituyen sistemas químicos muy estables, compuestos por el principio activo en tamaño nanométrico, a lo que se suman elementos de formulación de origen vegetal y agua.
Esta novedosa metodología de formulación permite que fitosanitarios ya conocidos, de probada eficacia en los sistemas agrícolas, como 2.4D, Dicamba, clorpirifós y dimetoato, entre otros, se comporten como “nuevos” productos, con una alta biodisponibilidad, lo que les permite utilizar hasta el 50% menos de dosis de ingrediente activo para lograr el control deseado. Al mismo tiempo, tiene beneficios adicionales como bajo olor, baja volatilidad y alta compatibilidad de productos en las mezclas de tanque.
Entre los referentes argentinos estuvo Enrique Fernández, responsable del área de Desarrollo de la empresa local Red Surcos, la primera en aplicar esta tecnología en Argentina y Latinoamerica. Fernández expuso los avances científicos en el desarrollo de nuevos productos nanotecnológicos para la protección vegetal, como insecticidas, herbicidas y fungicidas que ya fueron aprobados por los entes regulatorios de nuestro país y de varios latinoamericanos y que ya están disponibles en el mercado.
“Lo que hemos logrado con la aplicación de nanotecnología en la formulación de fitosanitarios no solo nos permiten obtener productos más eficaces y de menor costo, sino también tener un gran beneficio para el medioambiente, ya que se necesita menos del ingrediente activo para lograr el control deseado. Además, no se utilizan solventes derivados del petróleo, que son perjudiciales para los operarios”, remarcó Fernández, resumiendo el gran potencial de crecimiento que tiene esta tecnología. t