Ahora, granulados
Rizobacter comenzará a fabricar fertilizantes microgranulados en Pergamino, junto a la empresa francesa De Sangosse. La planta estará lista este año.
El uso de fertilizantes ha incrementado la producción mundial de alimentos, pero la misión de la agricultura no es únicamente producir suficientes alimentos, sino también suministrar los nutrientes que aseguren una nutrición equilibrada.
En Argentina, el uso de fertilizantes ha sufrido un estancamiento en los últimos años, a pesar de que la producción va en aumento, lo que muestra claramente que junto con los granos estamos exportando nutrientes, hipotecando los suelos para el futuro.
Algunos de los nutrientes que necesita la planta hay que aportár- selos en forma de fertilizantes químicos, que provienen de fuentes agotables, y a su vez la dosis pasa a ser regulada, no solo por una cuestión económica sino por un control ambiental, como en la Comunidad Europea, donde ya regulan dosis y momento de aplicación.
En Argentina las bajas dosis utilizadas no logran reponer los nutrientes exportados por los cultivos, donde el nivel de reposición está en el orden del 35 al 40%, lo que hace que el sistema suelo deje de ser sustentable.
Desde Rizobacter, nuestra propuesta de sustentabilidad para una fertilización eficaz es la tecnología de microgránulos. Hoy, los fertilizantes microgranulados son una tendencia aceptada y adoptada mundialmente, que viene a cambiar la cultura de fertilización.
Los microgránulos representan un salto cualitativo hacia la eficacia y precisión en el proceso de fertilización, logrando un aprovechamiento del 95% del fósforo en el ciclo del cultivo. Asimismo, brindan soluciones palpables de traslado, almacenamiento y aplicación. La técnica de microgranulación derriba mitos culturales en torno a la fertilización: el producto se aplica en contacto con la semilla, sin provocar daños durante la emergencia y aumentando las posibilidades de aprovechamiento por parte de la planta.
Por todo esto, Rizobacter, junto a De Sangosse, de Francia, levanta una fábrica de fertilizantes en Pergamino que empezará a funcionar hacia fines del 2015 y abastecerá el mercado local de fertilizantes microgranulados, con un saldo exportable hacia los países de América. t