Un “sí” para el glifosato
Ante los cuestionamientos al glifosato y su categorización como probable cancerígeno por parte de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), la Autoridad Europea en Seguridad de los Alimentos (conocida como EFSA) reevaluó a ese herbicida y contradijo al IARC, al declarar que “la evidencia no proporciona ningún dato creíble que sugiera una relación entre el glifosato y el cáncer”. La información, que fue difundida esta semana en Buenos Aires por CASAFE, la cámara que agrupa a las empresas de agroquímicos de Argentina, indica que la conclusión europea coincidió con la reciente evaluación de la Agencia Reguladora del Manejo de Plagas de Canadá (PMRA), que concluyó que “el glifosato no demuestra propiedades carcinogénicas ni mutagénicas, y que tampoco tiene efecto tóxico sobre la fertilidad, la reproducción o el desarrollo embrionario”. La información fue publicada en la página web de la EFSA el 12 de noviembre pasado. CASAFE sostiene, entonces, que “las conclusiones de estas destacadas instituciones se suman a los estudios de la Agencia de Protección del Ambiente (EPA) de EE.UU., el Instituto Alemán de Evaluación del Riesgo (BfR) y la Organización de ONU para la Alimentación (FAO), entre otros, que indican que el uso correcto del glifosato es seguro y no presenta riesgos”. CASAFE agregó que “también las agencias regulatorias de los 140 países donde está aprobado su uso, confirman su seguridad”.