A cuidar bien la sanidad
El INTA dice que hay que controlar más a la hacienda y reforzar vacunas, sobre todo en los terneros, que son más vulnerables.
contantes lluvias que se registraron en buena parte de Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Buenos Aires aumentan el riesgo de que los rodeos ganaderos se enfermen, con fuertes pérdidas para los productores. Por eso, desde el INTA elaboraron una serie de recomendaciones para cuidar la sanidad de los animales.
Sergio Crudeli, especialista del INTA Reconquista (Santa Fe) explicó que las cuantiosas precipitaciones provocan en el rodeo un estado de estrés que los predispone a contraer enfermedades que en otras condiciones no ocurrirían.
Es que por los anegamientos se reduce el campo de pastoreo y disminuye la disponibilidad de alimento, lo que puede provocar una deficiencia nutricional y una caída de su inmunidad natural. Además, los animales son expuestos al hacinamiento, lo que empeora aún más la situación.
En este contexto, el técnico aconLas sejó realizar recorridas diarias por los potreros, prestar mayor atención a los terneros y animales en recría y ante la menor sospecha se debe realizar de manera urgente una detección temprana de afecciones en el rodeo con el veterinario.
Si fuese posible, Crudeli aconsejó destinar un potrero cerca de la casa como lazareto (establecimiento sanitario para aislar a los infectados o sospechosos de enfermedades contagiosas) para poder estar más atentos a ellos y realizarles las curaciones.
En relación con los terneros y los animales en recría, el técnico recordó que son animales más susceptibles de enfermarse ante una caída de las defensa naturales. Una de las principales afecciones que podría desarrollarse al destete -combinado con la lluvia, el frío, el barro, el transporte, el hacinamiento y el cambio de dieta- es el Complejo Respiratorio Bovino.
En estos casos, aconsejó actuar ante los factores predisponentes inmunológicos y ambientales mediante la vacunación. En cuanto a las condiciones ambientales, el especialista subrayó la necesidad de que el potrero receptor de los animales destetados sea un lugar alto y que no se inunde.
Además, Crudeli subrayó la necesidad de vacunar a los animales antes del destete contra las enfermedades clostridiales, como la mancha, gangrena gaseosa y enterotoxemia.
Otra de las enfermedades emergentes en estas condiciones climáticas, es la leptospirosis. Para evitarla, la mejor opción es la vacunación de todos los animales del rodeo.
El hacinamiento y la humedad también favorecen la infestación con parásitos gastrointestinales en los terneros y animales de recría. “Se debe intensificar el control de los parásitos internos mediante un conteo de huevos en materia fecal previo a la desparasitación”, explicó el técnico.
En referencia a los animales adultos, Crudeli alertó que pueden manifestarse las enfermedades más comunes, como son el carbunclo (ántrax) y el complejo tristeza bovina.
La primera es producida por bacterias esporuladas, muy resistentes en el medio ambiente, que pueden vivir muchos años en la tierra y ser transportados por el agua, lo que aumenta las posibilidades de contagio de la enfermedad.
La segunda está compuesta por dos enfermedades: babesiosis y anaplasmosis. La primera es una enfermedad parasitaria transmitida por la garrapata común del bovino y la segunda es transmitida por el tábano o la garrapata.
Como medidas preventivas recomendó vacunar a los animales jóvenes y realizar tratamientos con antiparasitarios externos con baños, con el antiparasitario “pour on” o inyectables.
“Deben estar atentos a la aparición de garrapatas, aún en campos que se consideran libres o al aumento de insectos hematófagos, como los tábanos y las garrapatas”, advirtió el técnico del INTA.