Aplicaciones, con menos riesgos
La cama biológica es una alternativa para mitigar los peligros de los derrames de productos en el suelo.
El uso responsable de los productos fitosanitarios meque diante buenas prácticas agrícolas, comenzará por comprarlos con la correspondiente receta fitosanitaria, y debe continuar hasta la correcta gestión de los envases vacíos, lavados e inutilizados, para su posterior envío hacia centros de acopio, recicladores u operadores de disposición final.
Muchas veces surge la inquietud sobre cuál es el mejor lugar para realizar el lavado de la pulverizadora o para preparar la mezcla, ya en ambas situaciones existe el riesgo que se produzcan derrames de volúmenes altos de producto.
Una alternativa que se plantea para el manejo o mitigación de estos riesgos es la utilización de camas biológicas, también conocidas como “biobeds”. Constituyen un sistema que favorece el crecimiento de microorganismos que degradan biológicamente a los plaguicidas antes de que lleguen al suelo, al agua superficial o a la subterránea.
La construcción del sistema es factor vital para su correcto funcionamiento. En primer lugar, se debe realizar un agujero de 60 cm de profundidad, para luego colocar una capa de arcilla de 5 centímetros de espesor en el fondo y en los bordes. Esta capa permite disminuir la percolación, y retiene el líquido vertido en la cama biológica. En algunos casos se utiliza una capa plástica de 200 micrones, pero el uso de la misma depende del tipo de suelo.
Posteriormente, se deberá rellenar el resto del hoyo con una mezcla de paja (rastrojo de maíz, trigo o arroz) picada a un tamaño no mayor a 3 centímetros, suelo superficial y broza (hojas, ramas, cortezas) en una proporción de 5025-25 por ciento respectivamente. Se Recomienda dejarla en reposo por un mes antes de comenzar a utilizarla.
Por último, el sustrato deberá cubrirse con un colchón de grama o césped, el cual permite afirmar la superficie. Es importante que ésta se re-siembre cada año. En cuanto al sustrato, el mismo tiene una duración de 5 años aproximadamente, por lo cual luego de este periodo es necesario su recambio. Deberá colocarse en una bolsa impermeable y mantenerse allí durante 8 meses para permitir que los residuos preexistentes sean totalmente degradados; luego podrá incorporarse al suelo sin mayores inconvenientes.
Un aspecto importante para evitar el deterioro de esta técnica es que se encuentre recubierta de las lluvias mediante un techo de nylon o plástico. Asimismo, se deben ubicar en zonas del terreno elevadas para evitar inundaciones.
Se recomienda que sea recubierta de las lluvias con un nylon o plástico