Números que avalan la nutrición
Durante la jornada se presentaron datos concretos de varios ensayos en diferentes sitios productivos.
En esta semana ha quedado demostrado la importancia de nutrir los suelos para producir más y ser cada vez más sustentable, una de las consignas que se remarcó en el Simposio de Fertilidad 2017 organizado por la Fertilizar Asociación Civil que se desarrolLó esta semana en Rosario. Y los números lo avalan.
Andrés Grasso, quien es coordinador técnico de Fertilizar, comparó con ensayos en diferentes zonas las estrategias que utiliza el productor (realizan entre 800 a 1.000 encuestas a los chacareros) y la visión que tienes desde la entidad para contrastar ambos manejos y poder mostrar de forma empírica lo que se pierde el productor en producción y rentabilidad. “Hay una mejora muy importante “, sintetizó el directivo.
Grasso hizo hincapié principalmente en una secuencia de cultivos que es muy usual en los lotes argentinos sobre todo en los últimos años: la siembra de soja/soja. “Siempre recomendamos la rotación para aportar carbono al sistema, pero para el que sigue produciendo el monocultivo, por lo menos tratamos de que el daño sea el menor posible”, aclaró.
En este sentido, recalcó sobre la magnitud que tiene la soja en la Argentina con 20 millones de hectáreas en la cual el 40% se hace soja sobre soja.
Así, con este contexto, comparó el planteo promedio del productor y lo que se sugiere desde Fertilizar con ensayos de 6 años.
El coordinador técnico contó dos experiencias, ambas en Buenos Aires. Uno fue en Pergamino, al norte de la provincia, en la cual un productor ganó con su manejo en la soja U$S 137 por hectárea en 6 años por la fertilización (no del margen bruto de toda la producción). Y con el manejo intensificado que plantean desde Fertilizar, que consiste en moverse de los 10 kilos de fósforo que usa el chacarero a utilizar entre 20 a 25 kilos, agregando también azufre, la mejora del ingreso por la práctica es de U$S 545 por hectárea en el mismo tiempo.
Otro caso testigo es en 9 de julio, al centro de la provincia bonaerense, una zona que responde mucho más a la fertilización. Al productor le ingresó en 6 años U$S 1.500 por hectárea y el ensayo que realizó la entidad mejoró con la correspondiente nutrición a U$S 2.200 por hectárea.
Otra punto a tener en cuenta fue que los productores partían con suelos que tenían niveles de 6 ppm (partes por millón) de fósforo. Y con el manejo típico del productor, los niveles con nutriente disminuyeron a 5,5 ppm. Y con la estrategia balanceada, los suelos terminaron con 11 ppm.
A su vez, Grasso presentó datos a los más de 900 personas que asistieron al Simposio una práctica más, como es trigo/soja.
En la región húmeda (no solo comprende la zona núcleo triguera en el sudeste bonaerense) observaron que el productor hace un ajuste de 100 a 130 kilos de nitrógeno (N) y alrededor de 15 unidades de fósforo
Y tras 6 años de ensayos, Grasso puede asegurar que si el chacarero sale de este ajuste y sube la fertilización nitrogenada alrededor de 180 a 200 de N y agrega para alcanzar de 20 a 25 unidades de P, agregando azufre, puede pasar de U$S 43 que ganaría con el planteo básico a U$S120 con la estrategia adecuada en una sola campaña. “El productor funciona con memoria a corto plazo. Siempre tiene presente la experiencia que él tuvo. Hay nuevas tecnologías que no lo dejan salir. Veremos qué pasa este año con reglas claras”, concluyó.