El maíz en el sur bonaerense, con el potencial de la zona núcleo
La calidad de los campos de Carmen de Patagones implica algunos desafíos técnicos. Son campos con suelos muy arenosos y un regimen pluviométrico árido. Allí llueven 300 milímetros por año, por eso, la única opción para producir es el riego. En el desarrollo de campos que la empresa pergaminense Man Agro viene haciendo en la zona, aquellos que tienen cinco años de agricultura están logrando 12.000 kilos por hectárea de maíz de manera estabilizada. Aunque se ven picos de hasta 16.000 kilos. ”Creemos que se puede aspirar a las 20 toneladas que se logran en Chile en ambientes incluso inferiores”, se entusiasmó Rafael Aliaga, presidente de la firma.
Uno de los temas centrales para quedar cerca de ese potencial de 20 toneladas es tener una genética más adaptada a la zona.
“Encontramos lo que mejor se adapta en esta región en los materiales que fueron diseñados para otras zonas, pero sería ideal contar con algo más específico”, reflexionó Aliaga. Actualmente, en el cereal están usando ciclos medios a largos, de 128-120 días de madurez y lo que se necesita son ciclos un poco más cortos de de 100 días.
En la soja, adviertió el presidente de la empresa, sucede algo semejante porque los ambientes piden materiales grupos cortos (de madurez 2). Por eso, ahora, optan por los grupos de madurez 3 que tienen rendimientos razonables. Sin embargo, agregó Aliaga, estos materiales no alcanzan a competir con un maíz de 12-15 toneladas.
En el manejo, ellos también buscan la profesionalización continua, así como en los negocios, ya que la competitividad es una condición fundamental. Necesitan mantener este estándar por el tipo de negocio que adoptaron, de campos arrendados y gestionando capital de terceros.