El “supermercado” ya abrió sus puertas a los clientes del mundo
La feria de alimentos y bebidas, Aliment.Ar, fue un punto de encuentro para los agronegocios. Los protagonistas destacaron la oportunidad que brindó para hacer negocios y proyectar la matriz agroindustrial argentina.
La única feria de alimentos y bebidas de Latinoamérica, Aliment.AR, terminó ayer en Tecnópolis. Y el balance de tres días, más uno correspondiente a la feria LAC Flavors, superó las expectativas.
En esta expo se congregaron empresas de agroalimentos chicas, medianas y grandes de todos los puntos del país, también armaron su stand organismos oficiales, cámaras de cultivos y gobernaciones provinciales que llevaron a sus productores.
Al recorrer la muestra, los sentidos se activaban. Se veían proyectos innovadores, se respiraba agregado de valor y se escuchaba el entusiasmo de los protagonistas. Hasta en algún caso se podía llegar a degustar algún producto regional.
Simbólicamente,el “supermercado del mundo” ya abrió sus puertas. Pasen y vean gracias al recorrido que hizo Clarín Rural.
“Talisman Viejo” es la típica empresa agropecuaria argentina, de la localidad de Colón, provincia de Buenos Aires. “Producimos soja, maíz, trigo y, además, hacemos ganadería de ciclo completo”, describe Peter Hyland, gerente general de la firma.
Ellos tenían las ganas de agregar valor a algunas de las materias primas que cosechaban. Y veían el potencial en el maíz. Con esta motivación, y con una idea, llegaron al departamento de agroalimentos del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI). “Queríamos hacer un snack de maíz tostado, frito y salado. Argentina importa unas 240 toneladas de ese producto desde España, que es el mayor productor mundial”, dice Hyland. En tiempo récord, el INTI lo logró. Lo hicieron a partir de un híbrido no transgénico.
“Este es un caso emblemático de agregado de valor, supermercado del mundo. Logramos un producto listo para consumir para poder abastecer el mercado interno y con el potencial para exportar”, afirma Erica Stacey, la directora del departamento de agroalimentos. Ahora, agrega, la firma tiene la tarea de armar la planta, proyecto que el INTI también acompañará, para luego estandarizar los procesos industriales. Con el objetivo cumplido, el sueño se agiganta.
“De ahora en más, planeamos industrializar el grano que ya sembramos esta campaña. Con lo cual el plan es terminar la planta antes del mes de marzo para comenzar a ‘snackear’ el maíz porque ya tenemos posibles compradores”, concluye el directivo de Talismán Viejo.
La historia de otros bonaerenses se asemeja a la de Talismán Viejo cuando hace diez años se acercaron al INTI. Se trata de la empresa familiar América Pampa, que trabaja un total de 33.000 hectáreas en tres provincias argentinas.
Iván Milanesio, gerente comercial de la firma, detalla que se convirtieron en agroindustriales cuando comenzaron a agregarle valor a la soja no transgénica y orgánica que producen. Al grano de la oleaginosa lo texturizan y también lo convierten en harina micronizada para consumo hu-
mano, que luego venden en el mercado interno y también lo exportan a 35 países. Mariana Sánchez, coordinadora de procesos industriales del INTI, explica que, “la soja texturizada es un reemplazante de la proteína cárnica en Argentina y en otros países. En Argentina, por ejemplo, los productos procesados tienen un 3 por ciento de este producto y la empresa nos pedía que desarrolláramos fórmulas para que la soja texturizada sea un 25 por ciento de un alimento procesado. Con lo cual, había que lograr un texturizado con muchas características de la carne”. Gracias a esta interacción y a la posibilidad de adaptar el producto a los paladares locales y externos, “pudimos satisfacer las necesidades de los consumidores”, manifiesta Milanesio.
Una de las producciones insignia que representa a la provincia de Córdoba es el maní. Allí la cámara que representa a la cadena y varias empresas de ese sector armaron stands.
La directora Lorenzati, Ruetsch y Cia., Renata Lorenzati, junto con el vicepresidente de la Cámara del Maní, Eduardo Nervi, destacaron la actividad de la feria y la posibilidad de recibir a los clientes “en casa”, la Argentina. Lorenzati cuenta que tuvo que volver con urgencia a Ticino , la base de la empresa en Córdoba.
“Un grupo de taiwaneses que estaba de gira en el país y pasó por Aliment.AR con intenciones de hacer negocios en maní, quiso conocer el campo y la planta”, relata. La posibilidad de mostrar el proceso productivo y agroindustrial es una de las tantas ventajas que destacaron los expositores cuando el país es el anfitrió. Por su parte, Nervi adelanta que la proyección para este sector es el crecimiento marcado de los productos con mayor valor agregado.
“Aun no tengo una explicación cierta de por qué ahora estan apareciendo empresas muy grandes y con mucha reputación global que están pidiendo negocios de embarque de maní tostado cuando antes lo pedían crudos”, dice el directivo.
Al respecto, concluye que entre los desafíos para los próximos años, Argentina tiene que lograr reducir los aranceles de importación del maní en los países de destino y crear una marca.
Otra de las representaciones que dijo presente dentro del marco de Aliment.Ar fue Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas.
Pablo Villano, su presidente, manifiesta que dentro de la entidad hay unas treintena de empresas exportadoras de productos.
El directivo destaca que para las pequeñas y medianas empresas lácteas, la posibilidad de interactuar y vender directamente al comprador es un gran avance. Por eso, Villano le da una gran importancia a todos los negocios de venta de leche, suero y quesos que puedieron concretarse en el marco de la feria.
“Con este tipo de conexión con los compradores podemos exportar los excedentes y no sobreofertar el mercado interno”, señala.
Los arroceros también estuvieron en la expo.
“Que las partes nos conozcamos para hacer negocios directos en el arroz es muy importante. Más aun considerando la impronta cultural que tiene este cereal en muchos países”, sostiene Yamila Saiz, gerente de la empresa correntina Copra.
De esta manera, las relaciones interpersonales juegan a favor de la negociación en este cultivo. Gracias a la plataforma de negocios, Saiz se reunió con varias empresas de distintos países a los que Copra planea exportar producto.
La vitivinicultura o la producción de olivos son esquemas clave para La Rioja. La provincia armó un stand con gran despliegue en la expo.
A los riojanos, estos días se les dibujó una sonrisa en la cara, luego deque se conociera la elimación del impuesto a las bebidas alcóholicas.
Una de las bodegas que acompañó a la provincia fue San Huberto. Ellos contaron que durante la ronda de negocios se reunieron con países como Costa Rica, Noruega, Alemania o EE.UU. y estos destinos querían diversificar el portfolio de productos que ahora están importando.
La provincia de Santa Fe llevó a su stand una cooperativa muy chica de pecaneros, Pecanes del Litoral. La integran solo diez productores que en total tienen 110 hectáreas. Sin embargo, a vanzaron en la cadena y procesan la nuez, vendiendo las “mariposas”, en garrapiñas o bañadas en chocolate. Entusiastas reconocieron la gran vidriera que para ellos significó la feria.