Tips fierreros para que las pérdidas en soja se acoten a los factores climáticos
El cabezal es uno de los puntos neurálgicos de la cosecha y el buen operador no le debe perder pisada.
Las bolsas estimaron que los rindes de soja serán menores a las expectativas que tenían en febrero. Entre los factores que llevan a esta merma, se mencionan la falta de agua del perfil y el crecimiento del área triguera. La sequía se cobra un 6,3% del volumen estimado hace un mes. Y tras el crecimiento del área triguera, la soja de segunda ocupa casi 5,6 millones de hectáreas, es decir el 32% de las 17,3 millones en Argentina. Asimismo, en buena parte de la región pampeana, los rindes en soja de segunda podrían quedar por debajo de los 15 a 25 qq/ha. Con este nuevo panorama, el rinde nacional promediaría 30,7 qq/ha, 1,7/ha quintales menos que en el informe anterior. Por lo tanto, la producción de soja sería de 51,5 millones de toneladas.
Ante este panorama cobra relevancia toda acción que lleve a minimizar las pérdidas de cosecha y mantener alta la calidad del grano.
Y en ello el cabezal es importante ya que en él se genera cerca del 70% del total de pérdidas de cosecha.
Especialistas de INTA Manfredi y Balcarce, brindan las claves para mantener en línea las pérdidas del cabezal sojero. Señalan la falta de mantenimiento de la barra de corte y la mala regulación del molinete.
Es necesaria la alineación adecuada de los mandos de la barra de corte.
Con esta alineación se evitan los desgastes prematuros, se reduce el consumo de combustible, baja la cantidad de atoradas y también las roturas anticipadas.
La barra de corte ocasiona desvíos laterales en las plantas y su desgrane. Entonces, a fin de minimizar estas pérdidas se recomienda limitar la velocidad del equipo, la cual no debe pasar de los 7 km/h. Así lo señalan ensayos de Facultad de Ciencias Agrarias de Balcarce y el INTA.
Por otra parte, el avance del equipo en ángulo de unos 30 grados respecto de las hileras del cultivo, mejora el corte y genera un ingreso de las plantas a la plataforma más uniforme, con menos picos de carga. Además, se empareja el desgaste de las cuchillas y por ende aumenta su vida útil.
Otros beneficios del avance en diagonal es que las secciones de cuchilla y dedos se mantienen más limpios. Asimismo, favorece la uniformidad de distribución de los residuos y ello mejora trabajo de la sembradora en la siembra siguente.
El molinete también tiene sus bemoles, y según los especialistas, su velocidad tangencial será entre un 10 y un 15% mayor a la velocidad de avance de la máquina. Su altura será tal como sus paletas no entren en el cultivo más abajo de la mitad de la altura de las plantas. En cultivos normales -no caídos- los expertos recomiendan que el eje del molinete se ubique unos 15 cm por delante de la barra de corte. Con plantas volcadas recomiendan adelantar y bajar el molinete.
Así es mejor el desempeño del cabezal y menores las pérdidas.w