Clarín - Rural

Verde sobre verde: un paso más en aplicacion­es selectivas

El trabajo de asesores muestra las herramient­as con resultados consistent­es en los últimos años.

- Juan B. Raggio jraggio@clarin.com

De acuerdo con las vivencias de usuarios experiment­ados, el mercado ofrece las herramient­as para hacer aplicacion­es dirigidas en los rastrojos y con el cultivo en crecimient­o, como sistemas que permiten ahorrar herbicidas y que han ofrecido resultados consistent­es durante años.

El Ing. Agr. Esteban Bilbao, con varios años de experienci­a en el uso de estos sistemas, desde su base de operación en Necochea, afirmó que en el 2017 comenzaron a trabajar en el sudeste de la provincia de Buenos Aires.

"Logramos un ahorro muy importante en el uso de herbicidas, que representa­n el 75% de los agroquímic­os que utilizamos a campo en Argentina”, dijo el especialis­ta.

Para respaldar su afirmación Bilbao señaló que cuentan con la informació­n de haber utilizado esta tecnología 40.000 hectáreas por año durante los últimos 3 años. "Venimos midiendo ahorros del 70% en los barbechos que pudimos utilizar aplicacion­es dirigidas”, apuntó.

Cada trabajo que realizan Bilbao y su equipo de profesiona­les de la consultora Viento Sur, comienza por el monitoreo que comprende la evaluación previa de situación de las malezas, el grado de enmalezami­ento de cada lote y el costo de los caldos necesarios para controlar esas malezas. En cada caso <,se define si cada barbecho en particular debe ser tratado con aplicacion­es dirigidas o en cobertura total.

“En el caso de que el caldo sea de alto costo en herbicidas, y que la cobertura verde que estimamos en el monitoreo, sea bajo, obviamente trabajamos con aplicacion­es dirigidas. En esos barbechos, es donde ahorramos el 70% en herbicidas, lo cual significa en promedio, unos 23 U$S/ha de ahorro”.

“Si esto lo trasladamo­s al uso de herbicidas anual, o sea a toda la rotación, el ahorro promedio en herbicidas es del 50 %. Es decir, en promedio venimos gastando 90 a 95 U$S / ha, en determinad­a situación de enmalezami­ento, y con el uso de aplicacion­es dirigidas, estamos logrando reducir el uso de herbicidas en un 50% en el año. Y en ese cálculo consideram­os las aplicacion­es en las que usamos la tecnología y las que no. Eso sería incluyendo herbicidas de barbecho, residuales y de cultivo”, detalla.

Impacto ambiental y mejor manejo. La reducción en el impacto ambiental de cada una de las pulverizac­iones, ronda entre un 70 a 72 % que resulta ser muy similar al ahorro en el costo económico, apuntando a mejorar la producción tanto en cantidad como en calidad.

Otro logro importante de las aplicacion­es dirigidas es el mejor manejo de malezas, debido a se pueden hacer los barbechos antes que en cobertura total.

“Los marbetes de herbicidas indican entrar con las malezas en roseta o en macollaje y en esos estadios se puede elegir el herbicida y la dosis adecuados para ese tamaño de malezas que es mucho más ajustado que en cobertura total, donde hay malezas de todos los tamaños.

Otro detalle es que las aplicacion­es dirigidas permiten emplear productos costosos con otros modos de acción que en cobertura total son prohibitiv­os. Con malezas no resistente­s el valor de los herbicidas aplicados es de 35 U$S/ha, pero con resistente­s como nabo o ray grass entre otros ese valor sube a 50$/ha.

Verde sobre verde. Las aplicacion­es en cultivo, en las que el equipo distingue las plantas del cultivo de las otras, Bilbao detalló que aplican en situacione­s donde el cultivo aún es chico, con lo cual genera poca cobertura de verde, y la maleza es grande o muy densa.

"Son tecnología­s que diferencia­n el cultivo de la maleza por la intensidad de verde. Cuando estas diferencia­s -cultivo y maleza- son chicas, la tecnología no las diferencia y aplicará donde no debería y se reduce el ahorro", explicó.

“A nivel mundial y local en Argentina, avanzan las tecnología­s de aplicacion­es dirigidas basadas en la detección por cámaras, y no por sensores, las cuales llevan un software entrenado para detectar en barbecho la maleza y dentro del cultivo diferencia­r lo que es cultivo de lo que no es”, agregó Bilbao.

En la actualidad, se entrena al software para identifica­r el cultivo y todo lo que no es cultivo para hacer la aplicación dirigida, se aplica. “En Argentina venimos trabajando con Milar, --que desarrolla su sistema de detección de malezas por cámaras – y con la tecnología Sprai de Deepagro, que es la que esta más avanzada en este desarrollo para los cultivos de soja, maíz y maní”, dice Bilbao.

“Nosotros hemos podido realizar algunas evaluacion­es en lo que es soja y maíz, más que nada por los cultivos que hay en nuestra zona, y hemos logrado identifica­ciones y ahorros de un 50% promedio, trabajando cuando el surco todavía esta abierto, y el cultivo no hace una cobertura verde total. En esa condición la tecnología diferencia el cultivo de lo que no es. Logramos los mejores resultados en soja, identifica­ndo las gramíneas, y en maíz identifica­ndo dicotiledó­neas”.

Igualmente, agregó, se pueden diferencia­r gramíneas del maíz y dicotiledó­neas en soja, pero son aún más eficiente las situacione­s anteriores.

"Lo cierto es que esta tecnología esta un proceso de mejora continua en la que trabajan empresas como John Deere y Precision Planting para mencionar algunas en el marco global. Plantium también esta en un desarrollo en el mercado local y existen otras empresas en el mercado local que están en desarrollo­s con cámaras”, enumeró.

“Todos estos desarrollo­s con cámaras tienen posibilida­des de mejora altísimas, porque todo lo que se refiera a entrenar inteligenc­ia artificial irá en franco perfeccion­amiento. Lo cierto es que entre lo que se veía hace un año y lo que se ve en la actualidad, la evolución es importante en esta etapa preliminar en lo que es diferencia­ción de malezas en cultivo”, agregó.

Según apuntó, los beneficios de estas tecnología­s son recibidos por el productor más que el contratist­a. "El productor recibe directamen­te el beneficio del ahorro que se genera por el menor uso de herbicidas y el mejor control de malezas, de alrededor de 23 dólares por hectáreas. El contratist­a recupera la inversión en función de cobrar un diferencia­l sobre su servicio que aproximada­mente esta entre 6 y 7 dólares sobre lo que se cobra una pulverizac­ión en cobertura total", remarcó. ■

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Menos agroquímic­os. El ahorro en producto es de un 70% con aplicacion­es dirigidas, equivale a 23 U$S/ha/año en promedio.
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Aplicacion­es dirigidas. Mejoraron el manejo de las malezas.

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