La primavera del cine argentino llega en invierno

Parafraseando la buena película de dos egresados del Universidad del Cine estrenada el jueves, titulada El invierno llega después del otoño, todo parecería indicar que la primavera del cine argentino será en invierno.

Un hecho incontrastable es el éxito de Mamá se fue de viaje. Con las entradas que vendió anteayer, la comedia de Ariel Winograd superó en sus primeros 15 días a Nieve negra, con Ricardo Darín y Leonardo Sbaraglia, a la que le tomó 17 semanas llevar 684.474 espectadores. Y se vienen tres tanques nacionales casi al hilo. Los tres, con los tres actores más taquilleros del cine nacional de los últimos diez años.

Por orden de aparición, en cuanto a sus fechas de estreno, son Adrián Suar, que el jueves 10 de agosto llega con El fútbol o yo. Una semana después, Ricardo Darín, con La cordillera. Y el 7 de septiembre, Guillermo Francella con Los que aman, odian.

Que estén acompañados en cartel y en los afiches por actrices no debe pasar desapercibido. Así como Mamá se fue de viaje tiene a la mujer en el título, y Carla Peterson trabaja 20 minutos, menos que Anthony Hopkins en El silencio de los inocentes -qué acierto habrá sido incluir en el afiche de manera destacada la figura de la actriz-, los otros dos títulos tienen actrices de renombre. Acompañando a Darín, están Erica Rivas y Dolores Fonzi. A Francella, Luisiana Lopilato.

Y la por ahora tercera película argentina más taquillera del año -Los padecientes- tenía a Benjamín Vicuña y la China Suárez al frente del elenco. Tampoco Pampita Ardohain juega sola en Desearás al hombre de tu hermana, que estrena el 5 de octubre: la acompañan Mónica Antonopulos y Andrea Frigerio.

Los primeros seis meses de este año fueron decididamente de terror para el cine argentino, hablando en términos de taquilla. Un magro 7,2% del total.

Que Suar y Darín -mejor dicho, que las productoras de sus películas, Patagonik y Kramer & Sigman, para ser más precisos, pero para el público son Suar y Darín- estrenen cerca del feriado del 17 de agosto no es una casualidad. Tampoco, cuestión de patriotismo. El fin de semana “largo” del 17 de agosto viene siendo favorable a los títulos argentinos desde hace una década. Rememoremos: El Clan (Francella) en 2015;

Relatos salvajes (Ricardo Darín) en 2014; Corazón de León (Francella) en 2013; Dos más dos (Suar) en 2012; Igualita a mí (Suar), 2010; El secreto de sus ojos (Darín), en 2009; Un novio para mi mujer (Suar), en 2008. Exceptuando el año pasado, que estrenaron cerca del feriado por el General San Martín Inseparables (la anterior de Marcos Carnevale, que

dirige El fútbol o yo, y dirigió Corazón de León) y Permitidos (la anterior de Winograd), y en 2011, Viudas (Carnevale), que no anduvieron como se esperaba, la gente va a ver masivamente los estrenos, llamémosle “de industria”, como queda bien, o comerciales.

Pero no es una mera cuestión de títulos, aunque está visto que no cualquier película prende en el público argentino. La fecha importa: Hollywood no tiene tanques para estrenar en agosto. Las superproducciones se vieron en las vacaciones de invierno y semanas posteriores. Todo, más o menos, cierra. Así las cosas, con estas tres películas, más

Mamá se fue de viaje -ojo que puede terminar siendo la más vista de todas, si mantiene el paso-, y la de Pampita podemos tener un esperado segundo semestre como el que tantos soñaban en otros ámbitos.

Y hay que sumar Zama, de Lucrecia Martel, que estrena el 28 de septiembre -apenas arranca la primavera-, luego de su seguro paso por los festivales de Venecia y Toronto a comienzos de septiembre.

A no olvidar que una golondrina no hace verano, pero tal vez sí primavera. w

Que Suar y Darín estrenen cerca del feriado del 17 de agosto no es casualidad. Tampoco patriotismo.