La insoportable levedad de la vida cotidiana
La nueva obra de Ivor Martinic indaga en la rutina de una mujer y sus afectos, con muy buenas actuaciones.
Sobre Mirjana y los que la rodean Autor Ivor Martinic Dirección Guiillermo Cacace. Sábados y domingos a las 15.30 en El Picadero, Pje. Santos Discépolo 1857. Desde $300. “Qué es la vida?: Una taza de café ¿Qué es el amor? No sé, el control remoto”. Con ese tipo de conceptos lapidarios, el autor croata Ivor Martinic vuelve a indagar en los lazos que unen a los miembros de una familia. Pero lo hace enfrentando al público con personajes que están a la vuelta de la esquina, en cualquier lugar del mundo.
En Sobre Mirjana y los que la rodean, la versión local que dirige Guillermo Cacace en El Picadero, el foco está en los personajes femeninos. En Mirjana, su madre, su hija, su hermana, su vecina y amiga y en la lucha sutil y profunda que arrastra cada una en su vida cotidiana.
El trabajo sin brillo, la rutina hogareña, la sexualidad opaca son los puntos sobre los que esta mujer y sus afectos más cercanos lidian a diario. Atrapados en su propia red como una araña que no sabe que lo es.
La dupla que formaron el autor croata y el director argentino en Mi hijo sólo camina un poco más lento (un boom del off porteño hace dos años y aún en cartel), vuelve a probar que funciona como equipo teatral.
¿Cómo hacer para que la vida no sea tan insoportable? ¿Cómo encontrar un resquicio de alegría en el tedio cotidiano? La protagonista, interpretada por una brillante María Onetto, no para de hacerse estas preguntas sin enunciarlas. Pero le salen por los poros, en su actitud, en sus diálogos entre anodinos y crueles con su ex marido, con su madre, con su hija, con su amante.
Los personajes están como encapsulados en sus mundos, y para eso el recurso escenográfico de pequeños compartimentos, es ideal. Les cuesta mirarse a los ojos cuando hablan. Y manejan sus sentimientos como si fueran objetos extraños que les queman en las manos y no saben en qué estante ubicar.
El texto, poético en su aspereza; las luces, la música, y sobre todo las muy buenas actuaciones del elenco (además de Onetto, Gabo Correa, Lide Uranga, Florencia Dyszel, Mauricio Minetti, Marcela Guerty, Fernando Cortigiani y Agustina Groba) permiten al espectador preguntarse, condolerse y ser compasivo con estas criaturas. Tanto como si lo fuera consigo mismo.w