No sólo visten mujeres, también visten la casa
Cada vez hay más marcas de moda que se han diversificado hacia el mundo de la decoración hogareña.
“La decoración es rigor, simplicidad, comodidad, elegancia, sofisticación y sensualidad. ¡Pero todo eso al mismo tiempo!”. La frase no pertenece a un arquitecto famoso ni a un reconocido especialista en interiorismo, sino al diseñador Giorgio Armani, que como muchos de sus colegas incursionó en el arte de vestir ambientes de la casa para pasar de ser ícono de la moda a convertirse en referente de lifestyle. La tendencia tiene su página local: marcas argentinas de indumentaria como Kosiuko, Rapsodia y Wanama también apuntaron a imponerse como modelo de estilo de vida y pasaron a diversificar sus colecciones con propuestas que incluyen desde muebles hasta todo tipo de objetos deco para el hogar.
En general, el tránsito de la pasarela al interior de la casa se da una vez que la propuesta estética de una firma está bien definida. Las marcas capitalizan el deseo de las consumidoras de crear un espacio distintivo con un estilo que identifica su look personal y que hacen extensivo puertas adentro. Es el caso de Rapsodia Home -surgió hace un año-, ostenta la misma impronta oriental y bohemia que caracteriza su indumentaria: “Nació como una extensión orgánica de nuestra línea de ropa. La gente veía la decoración de nuestras tiendas y preguntaba por la lamparita, las cortinas, de todo...”, explica Josefina Helguera, creadora de la firma junto a Sol Acuña.
Espejos, mantas, alfombras, ropa de cama, objetos de bazar y muebles para el hogar son algunos de los productos que ofrece Rapsodia. En esta línea los detalles son todo. Su sello distintivo pasa por la combinación de brillos, color, texturas y prints con espíritu étnico. “Pensamos en mantas, suzanis (tejidos bordados orientales), terminados con crochets, diferentes terminaciones con moneditas, una onda muy gitana, muy bohemia, con un toque rockero también”, sugiere Sol Acuña. Hay productos de industria nacional y otros made in India, China, Marruecos y Perú, todos hechos con técnicas artesanales. “Nosotros costumizamos ese clima oriental con el estilo Rapsodia, o sea nuestra manera de hacer las cosas y de mirar el mundo”, detalla Helguera. La línea deco se comercializa en trece de los locales y también se vende online.
Un caso diferente es el de Casa chic, proyecto impulsado por el tándem creativo que forman Cynthia Kern y Federico Bonomi. “Herencia tiene el sello de Fede y Kosiuko, el mío. Casa Chic, el de ambos. En cuento a ropa, son marcas muy distintas, pero al fusionarse en esta tercera firma funcionan de maravilla”, explica Kern.
El disparador fueron sus emprendimientos hoteleros en Uruguay y Buenos Aires. “Exploramos nuestra
pasión por la decoración y armamos espacios con nuestro sello propio. Así, espontáneamente, los clientes qurían comprar detalles únicos elaborados por nosotros sólo para algunos hoteles. Y en 2009 abrimos nuestro primer local en Palermo Soho”. Hoy son nueve los puntos de venta, y hay que sumarle dos en Uruguay y , a la hora de vender, desde hace 6 meses también lo hacen vía e-commerce, para incursionar sobre todo en el extranjero. Cuentan con diferentes líneas: Home&deco, Bed, Kitchen y
Bath. Entre los productos hay cortinas, manteles, mantas, almohadones, tapetes, cuadros, espejos, vajillas, macetas (y sigue la lista...). La colección se renueva cada temporada y se dis-
tingue por sus diseños con estampas pintadas a mano. Los estilos vintage y shabby chic (en colores pasteles y con un aire campestre sofisticado) están muy presentes.
Al igual que Rapsodia, Wanama incursionó recién a fines del año pasado en este rubro. “Dejamos de ser solo una marca de moda, ahora representamos una experiencia integral en la cual se puede vestir toda la familia, decorar la casa y hasta saborear comidas en el Wanama Bar. Siempre existió la intención de lanzar la pata de decoración, pero antes necesitábamos madurar nuestra imagen”, desarrolla Federico Salvat, gerente de marketing y comunicación de la firma.
Ya tienen cinco locales en todo el país, anexados a los originales de indumentaria. Venden desde camas hasta jabones y velas, pero es en la línea textil (sábanas, almohadones, etc) donde más se manifiesta la impronta de la marca: “En varios artículos se pueden ver detalles que también tienen nuestras prendas. Y al igual que en indumentaria, la marca se hace fuerte en los blancos plenos y las tonalidades de azules, siempre dejando lugar para propuestas coloridas”, describe Salvat. La estética urban folk de la indumentaria de la firma se traduce en objetos con mucho de romanticismo vintage.
La historia de la marca de ropa argentina pionera en diversificarse hacia el rubro de la decoración es llamativa. Se trata de Prototype, que tiene cuatro décadas de trayectoria y hace doce años lanzó al mercado su línea
home destinada al nicho de alta gama. “Todas las primeras firmas de indumentaria de Europa y Estados Unidos tienen amoblamientos y adornos para marcar un estilo de vestuario y de vida a sus seguidores. De allí viene nuestro inicio”, cuenta José Romano, dueño de la firma.
Como muchas de las casas de decoración más exclusivas de Buenos Aires, Prototype debutó con una tienda en la calle Arenales, donde podían verse grandes muebles clásicos como escritorios, baúles y sillas Luis XV aggiornados a un estilo masculino y contemporáneo.
Sin embargo, desde hace un año y medio éste se independizó de la marca de ropa y sin cambiar de dueños se reinauguró bajo el nombre Romano Home Restoration como una estrategia para captar una mayor cantidad de grandes clientes como hoteles, empresas y particulares en busca de una propuesta integral para sus viviendas.w
La tendecia está inspirada claramente en la iniciativa de firmas glamorosas como Armani, Fendi, Versace y Donna Karan.