Hendler vuelve a sus orígenes
El actor protagoniza "El inestimable hermano" y lo vive como un regreso a sus orígenes teatrales, en Montevideo.
Volver a las fuentes, al origen como actor. Daniel Hendler está experimentando de nuevo la sensación del escenario con la obra El inestimable hermano, que protagoniza en el Espacio Callejón. Hendler, cara habitual del cine y la televisión, regresó al encanto del teatro independiente con una obra escrita y dirigida por Heidi Steinhardt, una tragicomedia en la que comparte trabajo junto a Natalia Salmoral, en la sala del director Javier Daulte, en el barrio porteño del Abasto.
“Cuando yo empecé como actor en Montevideo lo que más hacía era teatro. Tenía mi grupo que se llamaba Acapara el 522, donde dirigía y actuaba. Y también formé parte del Teatro Circular, de mucha tradición en Montevideo con el teatro independiente. Es como volver a las fuentes”, dice el actor uruguayo. “Para mí, el sentido del actor se termina de completar en el teatro. Tener al público ahí es muy distinto a lo que pasa frente a una cámara, de cine o de tele. En teatro, el actor vive una experiencia muy cercana a lo que sería un trance. En el escenario uno es su propio titiritero”.
En El inestimable hermano se habla de la relación compleja, tirante y oscura entre Inés y Bernardo, que estalla el día del cumpleaños de Fabio, otro hermano, pero ausente.
“Conocía a Heidi, la directora, porque había hecho un entrenamiento con ella y había visto una obra que me encantó El trompo metálico, donde trabajaba un amigo mío, Diego de Paula”. Su amigo fue el enlace y Heidi estaba escribiendo algo que quería que hiciera Hendler.
“Cuando leí la obra por primera vez, me asusté por la cantidad de letra que tiene mi personaje y el ritmo que hay que imprimirle. Pero a la vez, eso resultó el mejor desafío, era lo que me llamaba a lanzarme a la pileta. Ahora ya lo estoy disfrutando”, cuenta Hendler. “El tema es que mi personaje le quita algunos filtros a la conciencia y no respeta el espacio del otro. Su consciente y su inconsciente se mezclan, chocan y empiezan a brotar las asociaciones libres. Todo se vuelve una experiencia perturbadora, intensa y graciosa a la vez”.
Los hermanos de la historia son como dos polos opuestos, como una canilla abierta y una cerrada en la que misma presión de agua actúa de modo diferente. Y eso es lo que desata algo imprevisible.
“En teatro, los actores nos apropiamos de ese presente en tiempo y espacio y hay algo de la experiencia teatral en plena era digital y mediática que resulta atípico, novedoso, casi revolucionario. Porque los cuerpos están ahí, con todo lo que conlleva eso", asegura el actor. "Contrariamente a lo que pasa en el cine, donde todo está más controlado y digerido por una cámara, en el escenario, se corren más riesgos, pero el vértigo es mayor tanto para el actor como para el espectador”.
Hendler explica que no hace teatro con frecuencia porque no se lo proponen. “El teatro independiente no me atrae por sí mismo, pero es cierto que te permite una libertad de trabajo que no pasa en el comercial”.
Ahora, seguirá hasta diciembre con El inestimable hermano y luego filmará una película en Uruguay. También prepara una serie web en la que actúa y dirige que se llamará, Hermanos del espacio. “Creo las series web serían a la televisión lo que el teatro independiente al teatro comercial. Y quiero aprovechar esa posibilidad que se abre”. Info: El inestimable hermano, los viernes a las 22.15 en Espacio Callejón, Humahuaca 3.759. $220.