“Leer a Fernández Díaz es comprender a la Argentina”
“Somos como hermanos, somos muy amigos. Él me llama capitán, yo le llamo cuchillero.”
Arturo Pérez-reverte y Jorge Fernández Díaz, se sabe, consolidaron un vínculo personal y literario. Acaban de presentar juntos, en España, La herida, última novela del argentino. Y planean que sus personajes coincidan en la vejez, en Buenos Aires. Ese vínculo se refleja en sus trayectorias: uno miembro de la Real Academia Española, el otro de la Academia Argentina de Letras.
Pérez-reverte, incluso, compara a Fernández Díaz con Soriano: “Igual que en los ‘70 o en los ‘80. Leer a Osvaldo Soriano era comprender a la Argentina, ahora, leer a Jorge es comprender a la Argentina. Es el escritor más argentino en el sentido político y social. Es un paseo por la Argentina no visible. Y eso le da un valor. Aparte del valor literario, le da un valor documental, un valor histórico, digamos, enorme.
-¿Conoció a Soriano?
-No en persona, pero éramos muy amigos.
-¿Por carta, por teléfono?
-Hablábamos mucho por teléfono. Y en el último llamado antes de que él muriera… Recuerdo su profunda tristeza por el desprecio de que lo hacía objeto la intelectualidad argentina. La misma que ahora le prologa los libros. Jorge tiene una presencia, no pueden ningunearlo. Jorge es un tipo bravo. Es un Remil.