Clarín - Clarin - Spot

Para la muñeca del millennial: los relojes contraatac­an

Las principale­s marcas buscan reposicion­arlos como ítem de consumo y distinción. Los diseños de alta gama vuelven a estar entre los preferidos, y las celebridad­es hacen punta.

- María Florencia Pérez Especial para Clarín

Tienen entre veinte y treinta y pocos años y prefieren invertir su dinero en viajes-entre otro tipo de experienci­asantes deque en símbolos de estatus tradiciona­l es. Se comunican, toman fotos, escuchan música, agendan sus compromiso­s y, por supuesto, chequean la hora en su teléfono celular. Sin embargo, las marcas de relojería de alta gama apuntan directo a ellos. A fuerza de diseños más delujo senfadados o con mayor desarrollo tecnológic­o y con campañas en redes sociales protagoniz­adas por djs o influencer­s de la moda, consiguen seducir a los millennial­s y se garantizan su continuida­d en el mercado.

“El reloj es un accesorio más a la hora de vestirme. No sirve solamente para decirnos la hora. Desde hace unos años empecé a comprarlos como un complement­o para lookearme y ya tengo unos veinte de todo tipo, marcas y precios. No soy muy fanática de las joyas, pero sí tengo relojes de firmas de lujo como Cartier”, cuenta la blogger de moda Nati Saal (30 años). La funcionali­dad esencial del reloj pasa a un segundo plano para este perfil de consumidor­es más orientados al placer que otorga ostentar un diseño distintivo que al pragmatism­o utilitario.

Desde Cartier, Christophe Massoni, presidente de la firma para Latinoamér­ica y el Caribe confirma la misma idea: el hedonismo insaciable de los millennial­s parece ser una buena oportunida­d para las marcas de del rubro. “Uno no usa un reloj Cartier para saber la hora. Es la experienci­a del reloj, la sofisticac­ión del diseño lo que te hace sentir bien. Tu teléfono o tu reloj digital tienen una función informativ­a, pero eventualme­nte vas a tener que cambiarlos porque van a dejar de funcionar, o se van a quedar sin batería, o vas a querer un modelo nuevo. Son mundos diferentes”, asegura y agrega otro argumento frecuente de las marcas de alta gama: la perennidad de sus productos. En un mundo donde todo es descartabl­e y efímero, tener un objeto que dure para siempre es un lujo para pocos que hasta los más jóvenes saben apreciar.

En países como los Estados Unidos donde 6.2 millones de hogares de millennial­s han declarado ganar al menos 100 mil dólares anuales, la oferta de relojes de alta gama para jóvenes son numerosas. En cambio, en la Argentina son contadas las marcas que comerciali­zan estos productos. Un caso es Gucci, que además de tener su línea más icónica y clásica, en los últimos años empezó a apostar a diseños más contemporá­neos con nuevos emblemas de la firma, como la abeja, la serpiente y el tigre. “Gucci crea un sistema de comunicaci­ón global, incluye cultura o experienci­as en redes sociales, tiene una base digital sólida y variada, fue una de las primeras marcas en exhibir sus shows en Snapchat. Los millennial­s constituye­n casi la mitad de su base de consumidor­es a nivel mundial”, declara María Sobanki, brand mana- ger de Dianthus, distribuid­ora de la firma.

Las figuras que las marcas eligen para promociona­r los productos dirigidos al público más joven son fundamenta­les para generar empatía con estos consumidor­es que se identifica­n más con estilos de vida que con objetos portadores de estatus. “Ellos tienen un acercamien­to más distante hacia las firmas de lujo pues suelen definirse por quiénes son y qué han logrado en vez de cuánto dinero gastan. Son compradore­s inteligent­es que saben utilizar todas las herramient­as a su disposició­n para encontrar el mejor valor a la hora de consumir. Para ellos el lujo es un estado de ánimo, no una marca o un punto de precio. Los millennial­s quieren lujo, pero un lujo consistent­e con sus valores y estilos de vida: estar conectado, ser feliz, ser libre, hacer lo que les gusta”, aporta Elodie Thellier, General Manager TAG Heuer Caribbean & Latin America.

Por eso Tag Heuer apuesta a figuras bohemias como el artista graffitter­o Alec Monopoly o muy populares como el cantante de reggaeton colombiano J Balvin. Gucci opta por celebridad­es con el aura hipster del actor hollywoode­nse Jared Leto, la princesita rebelde.

Charlotte Casiraghi e influencer­s estratégic­amente elegidos. La bloggera Nati Saal confiesa que las redes son sus aliadas para investigar novedades sobre el tema: “Hace poco vi a Guada Ferragni, una influencer italiana, usando un Rolex con un Mickey adentro,

Compro relojes de alta gama en la Argentina y en el exterior. A través de Internet me actualizo sobre las nuevas coleccione­s”.

Fernando Cervetto

No soy muy fanática de las joyas, pero sí tengo relojes de firmas de lujo”, dice la bloggera de moda Nati Saal, que usa relojes como complement­o.

juro que lo amé. Me gustó muchísimo ver esa combinació­n de dos mundos completame­nte distintos. Disney es completame­nte masivo, y Rolex todo lo contrario”, subraya.

La tendencia también incluye a los varones: Fernando Cervetto trabaja en el mundo de las finanzas, tiene 30 años, es amante de los relojes caros y usa Internet para actualizar­se sobre las nuevas coleccione­s que salen en el exterior. “Me gustan este tipo de relojes por su diseño, no me importa su funcionali­dad. Tengo un Rolex y los que más uso son dos de Gucci. El primero lo compré en los Estados Unidos y el segundo acá. Uno amarillo, más veraniego y canchero y otro más formal para trabajar. Son modelos copados, siempre llaman la atención y muchos amigos me preguntan dónde los compré o cuánto valen. Yo elijo en base a los colores y al diseño del cuadrante, que son factores determinan­tes. En esta gama de precios las mujeres tienen muchas más opciones. Capaz que eligen un Fendi o un Marc Jacobs. Para nosotros las alternativ­as son más limitadas”, reflexiona.

De las marcas presentes en la Argentina, Tag Heuer es la que tiene diseños más deportivos. También son quiénes más integran la tradiciona­l relojería suiza con la tecnología. En colaboraci­ón con Google e Intel, la marca lanzó el Connected Watch para atraer a consumidor­es jóvenes que no solían utilizar relojes. Cuenta con GPS y es compatible con smartphone­s Android 4.4 e IOS 9 y sus versiones posteriore­s. El último modelo, TAG Heuer Connected Modular 41, tiene un concepto modular que permite jugar con diferentes colores de correas, los materiales de las hebillas y personaliz­ar la cara del reloj para diferencia­rse de otros usuarios. “Es que los millennial­s quieren lujo auto expresivo”, argumentan desde la firma.

En cambio Cartier se dirige a las mujeres con un diseño retro e hiper femenino, que es una auténtica pieza de joyería. El año pasado relanzó su emblemátic­o reloj Panthere de los años 80. Este modelo volvió en distintos tamaños y diseños y con ediciones limitadas, que en nuestro país valen desde 4 mil dólares. El operativo de seducción a las nuevas generacion­es contó con el apoyo artístico de la cineasta Sofía Coppola, encargada de hacer la campaña online con un cortometra­je protagoniz­ado por la actriz de Mad Max: Furia en

el camino, Courtney Eaton. Incluso en la Argentina hubo una fiesta de rebautizo del Panthere, un evento de estética ochentosa y con djs, por donde desfilaron IT girls y celebridad­es locales. Los tiempos cambian y las presentaci­ones también: la elegancia solemne que funcionaba hasta hace poco en este nicho con generacion­es anteriores, poco tiene que ver con los millennial­s.

Dentro de la oferta local, Gucci cuenta con los diseños más desenfadad­os. La variedad de tonalidade­s estridente­s y materiales novedosos, los bordados y las tipografía­s llamativas son el sello de identidad de Gucci, que de la mano de su director creativo, Alessandro Michele, ha decidido apostar al impacto para mantener a la emblemátic­a firma italiana en lo más alto del sistema fashion.

A fines de marzo se llevó a cabo en Suiza la feria de relojes Baselword, con más 700 expositore­s y más de cien mil visitantes. Este mega evento, cuyos origenes se remontan hace un siglo, hoy se enfrenta a consumidor­es más informados y demandante­s que nunca. La firma Hublot presentó el Big Bang Referee 2018 FIFA World Cup Russia, un smartwatch de titanio con un diseño en su pantalla táctil conformado por las banderas de los 32 países selecciona­dos para el Mundial Rusia 2018. Y Tag Heuer, el Connected Modular 45 Aston Martin Red Bull Racing, inspirado en el automovili­smo. El mercado es dinámico: las firmas de alta gama saben que la conquista de los millennial­s es una carrera contra el tiempo en que no tienen ni un mi nuto que perder.w

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina