Cocinar el huevo frito aporta el doble de calorías
Atrás quedó el mito de que hay que espaciar la frecuencia de consumo de huevo por su contenido de colesterol. Ya existe suficiente consenso sobre que se puede introducir en la dieta de los más pequeños desde los comienzos de la alimentación complementaria hasta en la vida adulta. Y es posible consumirlo todos los días.
Los huevos son fuente de proteínas de alto valor biológico (AVB), lo que les confiere una mejor calidad nutricional. Tienen grasas mono y poliinsaturadas que ayudan a disminuir los niveles de triglicéridos y colesterol LDL (el malo) en la sangre, reduciendo así el riesgo de padecer cardiopatías y accidente cerebro vascular (ACV).
Aportan vitaminas A, importante para el crecimiento y desarrollo del sistema inmunológico, vitamina D, que participa en la absorción del calcio y fósforo, contribuyendo al fortalecimiento y densidad ósea. Vitamina E, que actúa como antioxidante previniendo la formación de radicales libres, y algunas del complejo B, que intervienen en el metabolismo energético y la formación y salud de la piel, las uñas y el cabello. También contienen minerales, como hierro, potasio, fósforo y magnesio, indispensables para el correcto funcionamiento del organismo. Gracias a su aporte de proteínas, el huevo tiene un gran poder saciógeno, lo que lo vuelve muy útil a la hora de pensar en planes de descenso de peso, ya que sólo aporta 80 calorías por unidad aproximadamente, dependiendo de su tamaño. Claro que ese aporte calórico está limitado al alimento en sí, en estado natural, digamos. Pero si pensáramos en caer en la tentación del clásico huevo frito, estaríamos duplicando el aporte calórico a base de grasas. Una buena alternativa es cocinarlos a la plancha con rocío vegetal.
Debe asegurarse su cocción adecuada para alcanzar temperaturas calientes, que garanticen la destrucción de microorganismos patógenos, por lo que no se recomienda su utilización en preparaciones crudas, tales como mayonesas caseras.
Duro, pasado por agua, frito, a la plancha, en tortillas, omelettes, revueltos, para ligar rellenos, preparaciones dulces o saladas… lo cierto es que el huevo es un alimento de excelente calidad, beneficioso para la salud por su gran aporte de nutrientes y con innumerables formas de utilización en la dieta, que puede ser comido a diario. ¡Consumamos más huevo!