El sentido real del pasado
La realización de la Nueva Enciclopedia invita a reflexionar sobre las diferentes miradas sobre la historia de la Argentina. El pasado histórico es de todos, y cada uno tiene el derecho de entenderlo a su modo. En esta Enciclopedia ofrecemos una cierta visión, que confronta con muchas ideas sobre el pasado y el presente, arraigadas en los argentinos. Nuestro “sentido común” histórico es fuerte y denso, y en ocasiones, como ocurre al presente, emerge con vigor, para entrelazar las controversias actuales con la historia. Muchas veces, incluso, se recurre a versiones míticas del pasado, útiles en su momento, pero que conviene revisar con sentido crítico. El más importante de estos mitos se refiere a la existencia misma de la Nación argentina. Según la historia patria tradicional, la nación estaba latente desde tiempos inmemoriales, antes de ver la luz en 1810. Así, se habla de un territorio, o de aborígenes que lo poblaron, que desde siempre fueron argentinos. En estos casos, se trata de anacronismos: colocar en el pasado cuestiones que son posteriores, ignorando su especificidad. La noción de nación argentina fue el resultado de una construcción laboriosa e indeterminada, que sólo cuajó cuando fue sustentada por el Estado a mediados del siglo XIX.
Esto ocurre también con las versiones politizadas de la histo- ria, que defienden a un grupo o una idea, descalifican a los otros e instalan en el pasado el tono confrontativo y maniqueo que a menudo tiene nuestra política.
Aquí elegimos una alternativa diferente, que nos parece más útil para el lector: devolver al pasado su sentido específico, sin pretender acomodarlo al molde de las discusiones del presente.
“Las versiones politizadas defienden a un grupo o idea y descalifican a otros”