La Rural, una vidriera para los políticos a excepción de Scioli
El gobernador envió a figuras de su entorno, pero guarda distancia. Asisten Macri, Massa, Carrió y De la Sota.
“El campo puso el hombro en la crisis, por lo que ahora hay que ponerle el hombro al campo”, dijo Daniel Scioli, y de inmediato se ofreció a ser interlocutor ante el Poder Ejecutivo para buscar soluciones para el sector. Sucedió en invierno de 2003, en plena Exposición Rural de Palermo. Recién habían llegado al poder y hasta Néstor se animaba entonces a aparecer por la más tradicional de las muestras agropecuarias. Pero luego todo cambió. Ahora, sacando chapa de candidato kirchnerista, Scioli ya avisó que no lo esperen este año.
Cuando faltan días para las elecciones, la ausencia del candidato a Presidente del oficialismo es el dato político más notorio de una nueva edición de la Rural. El faltazo de Scioli llama la atención porque él siempre hizo esfuerzos por aparecer por Palermo y mantener el perfil de político de buen diálogo con los productores rurales. Hasta en la edición de 2009, a poco del duro conflicto por las retenciones móviles, se las ingenió para estar. Esta vez mandó dos alfiles, Gustavo Marangoni y Alejandro Granado. Pero solo pudieron disimular.
Mauricio Macri, Sergio Massa y muchos opositores más llenarán ese espacio vacío. El jefe de Gobierno porteño estará en el acto de inauguración del sábado, en un rol más institucional. El líder del Frente Renovador prepara una conferencia para anunciar en Palermo su plataforma agropecuaria.
Otros presidenciales aprovecharán esta cita anual para mostrarse y exponer sus proyectos para el campo. Por Cambiemos, Lilita Carrió estuvo el viernes y hoy pasará el radical Ernesto Sanz. Competidor de Massa en las PASO, el gobernador cordobés José Manuel de la Sota debió reprogramar su visita para esta semana. Margarita Stolbizer es todavía una incógnita.
El dueño de casa, Luis Miguel Etchevehere, lanzará el sábado el último discurso de la era kirchnerista. Prepara munición gruesa contra el gobierno que se va y pedirá definiciones de quiénes vendrán a sucederlo. Scioli, el gran ausente, se ha convertido en su blanco predilecto durante los últimos días. La buena onda de 2003 y los años subsiguientes ya quedó muy atrás.