Confirman que Cristina quiso disolver la SIDE en 2013
Fue tras el triunfo electoral de Massa. Así revelan escuchas telefónicas. Lo pudo concretar este año.
Fue en 2013 después del triunfo de Sergio Massa. Cristina había intentado descabezar entonces la cúpula de la ahora ex Side, un cometido que logró en 2015 cuando echó a figuras clave del organismo, creó la Agencia Federal de Inteligencia y designó allí a Oscar Parrilli. Ayer el diario Perfil publicó varias escuchas que se originan en la causa Dark Star que aún tiene en vilo a jueces, empresarios, jefes de la ex SIDE, dirigentes del Gobierno y de la oposición. Todos aparecen mencionados en las más de 16.400 fojas de escuchas realizadas por la SIDE, y convalidadas por la Justicia, durante más de tres años.
Clarín informó en su edición del pasado 29 de junio que Dark Star es una empresa de seguridad a la que el ex jefe de la SIDE, Jaime Stiuso, acusó de hacer espionaje para Gran Bretaña. Pero en realidad era una fachada para escuchar a decenas de personas. Se supo que el objetivo de la Side era espiar a otra empresa, C3 con domicilio en Puerto Madero y Palermo, donde trabajaban los agentes y ex agentes de la SIDE que tenían contacto con un enemigo de Stiuso, Fernando Pocino, aliado de Cristina Kirchner y uno de los pocos sobrevivientes de la purga concretada en diciembre de 2014.
Pocino, al que apodan Melena, frecuentaba las oficinas de Puerto Madero, en Alicia Moreau de Justo 740. En esa agencia también trabajaba un empleado de extrema confianza de Frank Holder, el ex espía de la CIA que se desempeñó en la embajada de EE.UU. en Buenos Aires y tiene estrecha vinculación con la consultora FTI Consulting, contratada por Torneos & Competencias para intentar sortear el escándalo en la FIFA.
Stiuso y Pocino habían sido alia
dos de Néstor Kirchner pero luego se enfrentaron por el poder de esa estratégica agencia con presupues
to multimillonario. El memorándum con Irán y el asesinato de uno de los hombres de confianza de Stiuso, Pedro “Lauchón” Viale, terminaron por romper la relación de Stiuso con la Presidenta.
En las escuchas autorizadas aparecen mencionados empresarios de renombre, jueces federales y de la Corte Suprema, jefes de la ex SIDE, funcionarios del Gobierno nacional como Florencio Randazzo o Amado Boudou, de la administración porteña, como Horacio Rodríguez Larreta, y hasta periodistas. Las escuchas también abordan las constantes luchas de poder entre los ex jefes de la SIDE o las alianzas de alguno de ellos con el ahora ex jefe del Ejército de la Nación César Milani, al que apodaban “Milanesa”.
Las conversaciones que trans- curren entre julio y agosto de 2013 demuestran la desconfianza de la Presidenta sobre el número dos de la ex SIDE, Francisco “Paco” Larcher, la ruptura con Jaime Stiuso y relata escenas de la derrota electoral.
Cristina estaba convencida de que un sector de la SI la había traicionado y los responsabilizaba por el triunfo de Sergio Massa. Un mes antes de la elección ya había decidido barrer con la cúpula y la estructura de Inteligencia del Estado. El domingo 11 de agosto, tras conocerse los resultados de las PASO su entorno la frenó.