Primera cabalgata en pony, un sueño de los más chicos que se cumple en La Rural
Se reparten hasta 400 números cada tarde para hacer pequeños paseos alrededor de un corral con los animales.
Olvidarse del edificio, la tablet y los jueguitos del celular. Para los nenes, la 129a. Exposición Rural de Palermo es la chance de romper con la rutina urbana. Pese a su corta estatura, este año pisan fuerte los ponys. En el stand de la escuela de equitación La Favorita, en cada jornada entregan 400 números para que los chicos tengan una vivencia atípica. Se llama “Mi primera vuelta a caballo” y consiste en un recorrido dentro del corral en el diminuto ejemplar.
Además, se puede acariciar y alimentar a los tres animales que hacen los paseos: Blancanieves, Azucena y Cucaracha, de pelaje marrón. “Para la mayoría de los chicos que viven en Capital es el primer contacto con caballos. Se nota la sorpresa que tienen”, cuenta Andrea Gatica, la encargada.
El paseo admite nenes de 2 a 11 años. El primero sale a las 11 de la mañana y el último al caer el sol. No tiene costo. Las familias también se pueden llevar la foto con la proeza del jinete, si pagan $80. O comprar la bolsita de alimento a $10 y sentir la rara sensación de una trompa confianzuda que se acerca a sus manos. “Algunos chiquitos creen que se les da la comida de lejos y cuando les enseñamos a acercarse y poner las manos en fuente se conmueven”, dice Andrea.
El entusiasmo se nota en Ema, de 6 años, que llegó con su mamá desde Los Polvorines. Mientras hace la cola, en el turno de las 18 y con unas 40 personas, está ansiosa. Se cuelga de las barandas, pregunta si puede acariciar a los animales, se enamora y mira las crines como si hubiera crecido en el campo. Después de la vueltita, se baja relajada, con la sensación que graba a fuego hacer algo por primera vez.
Otros chicos que crecen entre el cemento y las señales de celular se vuelven reincidentes. Eso le pasó a Bruno, de 5 años, que llegó desde un departamento de Flores. Su mamá, le cuenta a Clarín: “Cuando se acercaba la fecha de La Rural, enseguida empezó a decir: ‘Quiero ir a dar la vuelta en el pony’. El año pasado fue su primera experiencia y estaba un poco nervioso. Ahora lo va disfrutar a pleno”.
“¿Los animales se estresan mucho?”, pregunta una mamá. “Un poco por la cantidad de gente, pero están acostumbrados a los chicos porque se usan en equinoterapia”, responde Santiago Alvarez, uno de los paseadores.