Jazz, de Tokio a Buenos Aires
La cantante, que suele actuar en la capital japonesa, presenta hoy su nuevo disco.
Delfina Oliver es una de las voces del jazz argentino y su tercer disco Buenos Aires Bebop es otro paso en su senda como intérprete alejada de la comodidad de un repertorio tradicional. Hoy a las 21, acompañada por un quinteto que comanda el trompetista Ma- riano Loiácono, lo presenta en Café Vinilo (Gorriti 3780).
“En este trabajo puse el acento en la expresividad y el fraseo. El disco respeta en lo estilístico la atmósfera de fines de la década del cuarenta, años de puro bebop”, señala Oliver. Tras sus discos Miradas y Camino, la cantante vuelve de alguna manera a reencontrarse con un sonido más natural y en el que la fuerza rítmica y una mayor expresividad son protagonistas. Los arreglos estuvieron a cargo de Loiácono.
Oliver viene de hacer cuatro meses de shows en el Club Maduro, en Tokio, uno de los baluartes del género en la capital japonesa.
Quizás una de las mejores señales del trabajo es el tema de Mercer y Allen, That Old Black Magic, una composición poco conocida y que la cantante interpreta de manera arrasadora. “Durante los shows en Tokio, cuatro entradas por noche, seis días por semana, redescubrí lo fuerte que me siento en el fraseo; diría que resignificó mi carrera”, explica la cantante que ya tiene sus tres discos editados en Japón y que espera para su próximo viaje, en agosto de 2016, grabar en Tokio.
Por otra parte, Oliver fue una de las artistas que adoptó la modalidad de Crowdfunding o financiamiento colectivo, a cambio de diferentes recompensas y logró en un mes juntar el dinero para lo que sería la masterización, mezcla, arte y fabricación del disco. “Vivir de la música es difícil, más aún del jazz, y este sistema me permitió editarlo. Fue una jugada fuerte, porque requirió del apoyo de la gente que me sigue y ese apoyo apareció”, explica la cantante.
Sobre su concierto de hoy, dice que hay una afinidad y gusto por el repertorio, lo cual promete una noche de jazz vital.