“El bullying existió desde siempre, pero muchas víctimas no lo saben”
En el artículo “Bullying: ¿epidemia silenciosa” publicado recientemente en Clarín se aborda extensamente este fenómeno y cuenta con el valioso comentario de dos prestigiosas psicólogas. Es evidente que el mismo ha existido desde siempre, incluso es posible detectar formas iniciáticas en la novela “Juvenilla” de Miguel Cané, pero se lo consideraba algo “normal” o incluso beneficioso para forjar el carácter del niño-adolescente.
Hace unos cincuenta años era desconocido por educadores, profesionales de la salud y los padres. Los más afectados eran los hijos únicos, no era tan cruel como actualmente, pero sí igual de humillante. Los maestros lo consideraban como un especie de juego, los padres notaban algo extraño en sus hijos, pero era difícil que éstos hablaran, como lo es ahora tanto para el bullying como para el acoso.
Los médicos solían prescribir vitaminas y antidepresivos, oxigenadores neuronales y otros, generalmente bajo fórmula magistral. Normalmente no había grandes avances, los padres y muchas veces los mismos niños se cansaban, abandonando el tratamiento, ahondando aún más el problema. El ingreso al secundario no hacía más que profundizar el sentimiento.
Es la etapa más delicada en el desarrollo del ser, lo que condicionará su futuro social, afectivo, laboral y su rol en una sociedad de la que será parte.
Dado que la persona no es consciente que aquello que sufrió de niño es lo que condicionó su vida, pues en ese momento era desconocido e incluso “normal”, es raro que lo exponga en las sesiones con los distintos profesionales que va cambiando buscando una respuesta.
Es positivo que se difunda tanto sobre este fenómeno, importante para los niños-adolescentes actuales, pero también para aquellos que lo padecieron hace décadas, para comprender y tener alguna esperanza de mejora, enfocando el tratamiento en ese sentido.