Disfrazados de sacerdotes, llevaban 47 kilos de marihuana
Son dos hombres que fueron detenidos en la ruta 14, en Corrientes. El cargamento iba al barrio porteño de Flores.
Se habían caracterizado como sacerdotes, para no llamar la atención. Pero cuando fueron parados en un control de la Gendarmería, en una ruta de Corrientes, su actitud despertó las sospechas de los agentes. También algunos detalles del auto en el que iban, como el excesivo peso de las puertas y el hecho de que los vidrios de las ventanillas no se bajaran totalmente. Entonces, se hizo una requisa y hallaron casi 47 kilos de marihuana. Los falsos curas quedaron detenidos.
El operativo se hizo en el kilómetro 536 de la ruta nacional 14, unos 60 kilómetros al norte de Paso de los Libres. Allí, personal del Grupo Seguridad Vial “Tapebicua”, dependiente del Escuadrón 7 “Paso de los Libres”, estaba haciendo un control de rutina.
El vehículo con los dos supuestos sacerdotes provenía de Puerto Iguazú (Misiones), aunque se cree que la marihuana fue comprada en Encarnación (Paraguay). Tampoco se descarta que el tráfico haya comenzado en alguna localidad misionera ubicada a orillas del Paraná, frente al vecino país, en la denominada zona caliente.
Los agentes pidieron al Juzgado Federal de Paso de los Libres la orden de requisa y las sospechas se confirmaron rápidamente: al retirar los paneles de las puertas del coche, encontraron 70 paquetes rectangulares comúnmente llamados “ladrillos” de marihuana.
El peso total de la droga transportada era de 46,946 kilos, cantidad que en el mercado paraguayo se cotiza en unos 450.000 pesos argentinos. Su destino era el barrio porteño de Flores, aparentemente la villa 1-11-14.
El Juzgado federal ordenó la inmediata detención de los dos hombres. Sus identidades no fueron reveladas ni por la Gendarmería ni por el Juzgado federal de Paso de los Libres, donde la reserva en torno al caso era ayer absoluta, al extremo que la noticia se conoció primero en Buenos Aires. En Corrientes, solo había rumores del nuevo hallazgo de droga, pero ninguna información certera.
Fuentes judiciales confirmaron a Clarín que está establecido que no se trata de religiosos, sino de dos narcotraficantes que eligieron el curioso truco como un método para tratar de evitar los controles cotidianos en esa zona de la provincia de Corrientes.