Temperley no le perdonó a Vélez tantos errores
Grillo empujó a Esparza y Vilchez empató el partido. Luego se equivocó Somoza y Sambueza lo definió.
Cambiar para que todo cambie. Un concepto que bien supo utilizar Ricardo Rezza para tonificar a su equipo y alcanzar ese triunfo que le era esquivo desde hace cuatro fechas. Error de Miguel Russo que modificó su esquema en el segundo tiempo y no le dio el resultado esperado, llevándose otra derrota y muchas dudas de cara al futuro.
Tomó la iniciativa del juego Vélez con bastantes espacios para maniobrar y llevó a Temperley hasta su propio campo. En esa ráfaga inicial generó dos buenas acciones de riesgo: un remate de Leandro Desábato que Federico Crivelli despejó al córner, y otro disparo cruzado de Milton Caraglio que se fue apenas desviado. La señal que mandó Vélez desde el arranque fue clara: ser protagonista.
Temperley, por su parte, buscó hacer pie en la conducción errática Leonardo Di Lorenzo, pero solo mostró agresividad con la habilidad de Fabián Sambueza y el despliegue del eléctrico Gabriel Esparza. Sin embargo, tuvo discretas aproxi- maciones al área de Alan Aguerre y dejó muy evidente su falta de resolución en los metros finales.
Se veía venir. Leandro Desábato recibió muy libre y se animó con un remate desde media distancia para colocar la pelota al palo derecho de Crivelli, que hizo espectacular la postal con una volada hermosa desde lo estético pero improductiva. Un gol que celebró Vélez para cortar una sequía de 204 minutos y dejó expuesto el desconcierto y la endeblez de la defensa local.
Las debilidades de Temperley para generar peligro se resumieron en los múltiples centros que no tuvieron un destinatario fijo. Ni el grandote Pablo Vilchez ni los volantes pudieron resolver una maniobra en el área y permitieron el lucimiento de los centrales visitantes, que rechazaron una y otra vez los envíos anunciados.
Metió mano Ricardo Rezza y las variantes le cambiaron la cara al equipo. Es cierto que el infantil penal de Fausto Grillo (un burdo empujón a Esparza) fue determinante. Empató Vilchez y así cortó una serie de 290 minutos sin goles, en el primer penal que le otorgan en el torneo. Ahí, los fantasmas se apoderaron de Vélez. Y Temperley se agrandó. De contragolpe el local encontró los ansiados tres puntos. Leandro Somoza, el más experimentado, perdió una pelota, Esparza la manejó, realizó una pared con Dinenno, remató al arco, Aguerre dio rebote y Sambueza la cabeceó por arriba del arquero. Fue el 2-1 y el delirio de los hinchas locales.