Propuesta de Pescarmona para salvar su empresa

Impsa, la empresa de Enrique Pescarmona, le propuso a sus acreedores cederle un 40% de la compañía para saldar una deuda de US$ 1.000 millones. La firma mendocina también les ofertará pagarles a través de una nueva emisión de deuda, por US$ 468 millones, con vencimiento hasta 2031 y una quita de 68% con respecto a las Obligaciones Negociables (ONs) originales, que Impsa incumplió y por lo que cayó en default.

La propuesta cuenta con el “consenso preliminar de un grupo importante de acreedores”, según comunicó Impsa a la Bolsa. Juan Carlos Fernández, gerente general de Impsa, dijo que cerca de un 20% de los acreedores prestó su consentimiento.

Impsa necesita la aprobación de un 66% de los acreedores para firmar un acuerdo que le permita reestructurar su deuda. En la compañía calculan que lo lograrán hacia mediados de 2016.

La empresa de la familia Pescarmona incumplió el pago de deuda por US$ 250 millones emitida en el país y casi otros US$ 750 millones de sus operaciones en Brasil, pero que estaban garantizadas por la empresa en Argentina.

“El 100% de los flujos netos de fondos que las operaciones de la empresa van a generar se asignarán en su totalidad a los acreedores, hasta el pago total de la deuda reestructurada, lo que implica que los accionistas controlantes no recibirán ni un peso o dólar de esos fondos”, dijo Fernández.

Impsa factura alrededor de US$ 300 millones anuales. Redujo su plantilla de 1.400 a 1.000 operarios desde 2014. Un contrato con Venezuela se puso en marcha en los últimos meses, mientras que en Brasil poseen Wind Power Energia (WPE), que están tratando de ven

der. A los acreedores de esa firma también le harán una propuesta el próximo 3 de diciembre.

Para cumplir con los acreedores locales, planean dos emisiones de ON: una por US$ 146 millones, que se pagará entre 2026 y 2031 a la “par”, es decir por el mismo valor nominal que tienen los acreedores cuya deuda Pescarmona incumplió. La tasa es de 1%. La otra ON es por US$ 322 millones, pero allí los acreedores tendrán una quita del

68% con respecto al valor nominal original de las ON. Se pagará entre 2020 y 2025. Allí, los intereses van de 7,5% y 9,5%.

Los acreedores son bancos como el Nación, Galicia, Hipotecario, bancos internacionales, bonistas y el BID”