La SIP condena el asesinato de un periodista en Brasil
El Estado de Pernambuco, en el noreste de Brasil, es un territorio inmenso, bellísimo y peligroso, cuya capital es Recife, una de las ciudades mas inseguras de ese país. El lunes último, en el municipio de Lagoa de Itaenga, precisamente en Pernambuco, dos hombres en motocicleta balearon al periodista Israel Gonçalves Silva, que murió en el acto.
Es uno más de una larga lista que coloca a Brasil entre los países más peligrosos del mundo para ejercer la profesión. De acuerdo al Indice Global de Impunidad Periodística realizado por el Comité para la Protección del Periodismo (CPJ), con sede en New York, Brasil ocupa un lugar, el número 11, entre los 14 países en los que los asesinatos de periodistas son frecuentes y casi nunca resueltos. En ese pelotón figuran Somalía, Irán y Siria, entre otras naciones. La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó el asesinato del periodista Gonçalves Silva, el cuarto ocurrido en Brasil este año, y llamó a las autoridades a actuar con urgencia para identificar los motivos y sancionar a los responsables del crimen.
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, Claudio Paolillo, expresó sus condolencias a los familiares y colegas del periodista, sepultado ayer en medio de pedidos de justicia.
El periodista, de 37 años, trabajaba en la radio romunitaria Itaenga FM, del municipio de Lagoa.
Sus colegas y sus oyentes consideran que tenía una postura crítica con relación a los problemas de la ciudad en materia de política y de seguridad pública. Había recibido amenazas de muerte sobre lo que informó al aire semanas atrás.
En su programa, dejaba los micrófonos abiertos para que la gente expresara sin filtro sus reclamos ante las autoridades.
La presidenta Dilma Rousseff no se pronunció al respecto.