Ida y Vuelta
Voces y miradas en una jornada cívica crucial
Este es el mejor momento para que nuestros políticos, de la bandería que sean, bajen un cambio y comiencen a dialogar en forma civilizada. El hecho de pensar distinto no es un detalle para desatar agresiones entre oficialistas y opositores. Deberíamos tener diálogo que hace rato no existe: los últimos gobiernos comienzan con mucha euforia y terminan con una soberbia que aterra. Ante cualquier resultado, basta de niños muertos por la inacción de las falsas promesas políticas. Y, sobre todo, bienvenido el diálogo ameno y constructivo que hace muchos años no tenemos.
Carlos Carvalho
electrocarvalho2015@gmail.com
Los argentinos tenemos hoy la oportunidad suprema de elegir el futuro del país que queremos y merecemos a través del voto. A la sociedad le pido con todo respeto que vote con el cerebro y no con el corazón, y dejo como reflexión un pensamiento árabe: “Si me mientes una vez, la culpa es tuya. Si me mientes dos veces la culpa es mía.”
Juan A. Giobellina
mabelinav@hotmail.com
“¿ Vas a creerme a mí o a tu propios ojos?”, bromeaba Groucho Marx. ¿Broma? En Argentina no lo fue. Por una década, fuimos enseñados a descreer de lo que veíamos. Nos enseñaban que la cantidad de pobres, de chicos drogados, de gente muerta en las calles, era un espejismo, era la secuela de hacerles caso a nuestros ojos. Pero los bonaerenses vieron los campos inundados, las fábricas cerradas, y creyeron en sus ojos, salvaron su cerebro ante la pregunta de Groucho. Hoy ante las urnas abramos los ojos. Y después, colorín colorado …
Miguel Angel Pando
mapando@fibertel.com.ar
Pocos gobernantes llegarán al poder en condiciones tan difíciles como las que existirán a partir del 10 de diciembre de 2015. Las instituciones se encuentran asfixiadas por el enrarecimiento de la atmósfera política y desde el último lustro no parecen reflejar ya el exacto papel que desempeñaban en la vida del país. La Argentina continúa trabado por el odio, la apariencia, la desconfianza y los prejuicios.
No será fácil compaginar la fisonomía de una Nación moderna, llena de perspectivas y posibilidades. Por eso hay que invadir la nueva gestión con un nuevo estilo político. Y liderarla no sólo pacíficamente, sino dentro de la esfera de lo estrictamente legal. Hay que caracterizar la entrada al Gobierno con un doble signo programático: legalidad y crecimiento.
Ezequiel Amaro
ezequielamaro@yahoo.com.ar
Hoy se sabrá quién tomará las riendas del poder para conducir nuestro país. Un país que se encuentra necesitado de unidad, de diálogo, de mayor encuentro, de pluralidad sin excepciones, de paz civil, de mayor transparencia de la cosa pública. Gane quien gane, ambos candidatos tienen como desafío zanjar “la grieta”.
Fernando Algaba
fernandoalgaba@hotmail.com
“Que un pobre vote a Macri es como que un judío vote a Hitler”, fueron palabras del actor y militante kirchnerista Gerardo Romano. ¿ Sabrá Romano lo que es la pobreza? ¿Alguna vez pisó los barrios empobrecidos del conurbano bonaerense? ¿O del norte argentino? ¿Sabe que quien hoy es pobre, es todavía más pobre que el que estaba en esa condición durante las décadas pasadas? ¿Sabrá que hoy la plata no le alcanza ni siquiera para una alimentación básica adecuada?
Yo convivo a diario con gente necesitada al extremo y puedo decirle a Romano que es muy fácil hablar de pobreza con el estómago lleno. Señor, dése una vuelta por mis pagos de La Matanza y comprobará que los pobres no han desaparecido sino, mucho peor e imperdonable, se han multiplicado.
Alberto Pintos Morel
alberto-50-55@hotmail.com.ar
El 2015 fue un año plagado de contradicciones, de promesas, de alejamientos, de acercamientos, de pérdidas de tiempo y dinero, ya sea en campañas, en cortar vías de acceso a quien quería ir a trabajar, en discutir sin escuchar al otro y varios etc. más. En este día pensemos que alguien dijo alguna vez ... “el que no cambia todo, no cambia nada” y “... la arena es un puñadito, pero hay montañas de arena”.
Oscar Rissotto
rissotto_554@hotmail.com