Un nene de 11 años, herido en un tiroteo entre bandas
Mientras el calor hacía estragos en Santa Fe, con una temperatura cercana a los 37 grados, el tradicional silencio de la siesta era interrumpido en el barrio Las Lomas por un intenso tiroteo entre bandas que terminó con un nene de 11 años herido. La víctima recibió un balazo en la cabeza y anoche continuaba internado, en estado delicado.
Según informaron fuentes del caso, el violento enfrentamiento sucedió el lunes, cerca de las 14.30. Iván Alvarengo estaba jugando bajo la sombra de un árbol. El tiro le ingresó por la oreja derecha y lo dejó inconsciente. Fue socorrido por sus hermanos hasta un centro de salud de la zona. Ante la complejidad de
la herida, los médicos ordenaron el inmediato traslado al hospital de Niños Orlando Alassia. Anoche, fuentes del hospital informaron a Clarín que el chico continuaba internado en la Unidad de Terapia Intensiva, en estado grave y con
respirador artificial.
“Iván estaba jugando cerca de un árbol, en la sombra, por el calor. Al escuchar los tiros, quiso venir a mi casa y una bala le perforó el
cráneo. En este barrio es muy común que ocurran estas balaceras. Tiran y tiran al azar. No se pudo ver quién fue”, contó a Clarín Patricia Romero, mamá de la víctima. Por el caso no hay detenidos.
No es la primera tragedia que afronta la familia del nene. “El padre de Iván murió hace tres meses, en un episodio muy similar. Estábamos tomando mate y se armó un tiroteo y una bala perdida le atravesó el corazón. Las Lomas es un barrio olvidado, la Policía no entra”, agregó la mujer.
El reclamo de más seguridad no es nuevo en la zona. “Hace unos meses, se había firmado un acuerdo que estableció la presencia permanente de un patrullero. Se venía trabajando muy bien, pero lamentablemente eso se cortó”, contó un vecino.
El peligro del barrio también afecta a los centros de atención médica. Tras el enfrentamiento del lunes, el Efector de Salud cerró sus puertas durante algunas horas. Los médicos y las enfermeras denunciaron que los tiroteos son cosa de todos los días y decidieron tomar la medida de fuerza para resguardar
sus vidas. Al respecto, el secretario de Gestión Territorial de Atención de Salud, Jorge Stettler, reconocio el problema. “El próximo lunes habrá una nueva reunión. Los profesionales piden garantías y es absolutamente lógico. Pero también tienen miedo de que la situación de violencia que se padece en ese sector los toque de cerca”.