Lo de Wanchope es muy difícil
Ramón Wanchope Abila quiere empezar a cambiarse en el vestuario de Carlos Tevez, su amigo y con quien además de compartir representante, también los une el gusto por el cuarteto cordobés y la Mona Jiménez. Sin embargo, aunque el run-run juegue su propio partido, no parece tan senci- lla la mudanza de Parque Patricios a La Boca.
“Es imposible pagar ocho millones de dólares”, dejó en claro anoche Rodolfo Ferrari, vicepresidente primero de Boca. Bajó así las pretenciones iniciales del Globo, que no se estacionan en los cinco millones verdes que estipula la cláusula de rescisión. Alejandro Nadur, presidente de Huracán, ya avisó que por ese dinero Wanchope no se irá. En el Globo piensan que, de mínima, deberían percibir 6,5 millones de dólares por su delantero sensación. Huracán compró a Abila en enero de 2014, a Instituto, por 400 mil dólares.
El problema es que en Boca no hay unanimidad con respecto a esta posible operación. Si bien se destaca que es un futbolista interesante y de gran presente, algunos dirigentes sostienen, en privado, que significaría una erogación muy alta por un jugador de 26 años y con el interrogante planteado acerca de cómo rendirá con los flashes encima y la camiseta de Boca puesta.
La historia continuará y promete ser una de las novelas del invierno. ¿Podrá Wanchope empezar a cambiarse al lado de Carlitos?