Los Laudatos, la “comunidad” que enlaza al Papa con Perón
Armaron un documento de 10 puntos. Pino Solanas se lo entregará a Francisco. Tratan a Macri de tecnócrata.
Fernando “Pino” Solanas parece que tuvo más suerte que Mauricio Macri: el senador, que fue (o es) peronista pero hace décadas se despegó del PJ, se verá el lunes con el papa Francisco, justo el 17 de octubre, la efeméride mayor de los peronistas.
Esa fecha figuró en la agenda original de la Casa Rosada para la audiencia del presidente con el Sumo Pontífice pero luego, entre disculpas y diplomacia sutil, se reprogramó para mañana. Ayer, Macri voló rumbo a Roma.
Solanas le entregará a Francisco el documento que ayer presentaron “Los Laudatos”, la cofradía de políticos, sindicalistas y empresarios que durante meses se reunieron en secreto en el gremio de Canillitas, con Omar Plaini como anfitrión.
Es una síntesis de las reuniones que arrancaron en marzo. La primera duró casi 5 horas y fue, como las tres siguientes, grabada de principio a fin. En la quinta, entre chispas y rabietas, no. Gustavo Vera, a quien el Papa llama “el troskista de Dios” por su antigua militancia de izquierda, fue uno de los que tendió los enlaces. Otro: Eduardo Valdés, ex embajador de Cristina de Kirchner en el Vaticano. El llamador, según reconstruyó Clarín, fue un diagnóstico sombrío sobre la economía que alertaba que el “modelo” de Mauricio Macri podría detonar una crisis social.
Ante ese peligro, la política debía prepararse para contener y ayudar al Gobierno. Tejer una red: la Red Laudática, según el nombre oficial. “Los Laudatos” o “Laudatianos”, como se llaman los que integran ese clan básicamente - pero no excluyentemente- peronista y que toma como guía al Papa.
El plan de contención tenía como base promover la unificación de las CGT para formar un scrum sindical que intervenga ante un eventual estallido.
En las juntadas, como eruditos del Medioevo, “Los Laudatos” se entregaron a cotejar las similitudes entre la encíclica “Laudato Si” de Francisco y el “Modelo Argentino”, que a principios de los ‘70 Perón perfiló como su legado. La mesa fue grande y variopinta. Solanas, Valdés, el diputado Felipe Solá, los hermanos Héctor y Rodolfo Daer, Andrés Rodríguez (UPCN), Alicia Pierini, el ex embajador Hernán Patiño Meyer, el intendente Gabriel Katopodis, Claudio Mate, el industrial bonaerense Federico Cuomo, Enrique “Pepe” Albistur, la diputada sciolista Cristina Alvarez Rodríguez, Julián Domínguez, el sindicalista Víctor Santa María, el intendente Gustavo Menéndez, Mariano Mera Figueroa, Gabriel Mariotto, fueron algunos de los muchos que pasaron por Canillitas, además de Vera y Omar Plaini, el anfitrión.
Peronismo multicolor: cercanos a Sergio Massa, sciolistas, sindicalismo de estirpes varias, ex funcionarios de Duhalde, renovadores neocafieristas y algún que otro K.
Cero macrismo. Para espantar el olor a conspiración, se vieron con Federico Pinedo, Germán Garavano y Cristian Ritondo. Dos temas sobre los que martilla el Papa: lucha contra el narcotráfico y contra la trata de personas.
Pero en su texto, “Los Laudatos” filtran ideas ásperas: dicen que Macri instauró un gobierno “tecnocrático” que persiste e imponer la “teoría del derrame” y alertan la “amenaza” de los tratados de libre comercio. El documento – que el lunes Francisco tendrá en sus manos– cierra con diez puntos donde hay una defensa de la “soberanía energética”, la “equidad social” y el “desendeudamiento”, llaman a multiplicarse en otras redes e invitan a sumarse a “la gesta”.