El All Star dejó poco básquet, dos récords y un pase ruidoso
Venció 192-182 el Oeste, Anthony Davis metió 52 puntos y se anunció que DeMarcus Cousins llega a New Orleans.
El All Star Game es la máxima expresión del show de la NBA. Juegan los mejores, electos por el voto de la afición. Hay concursos de habilidades, triples y volcadas, presencia de famosos, merchandising alusivo. Mascotas y porristas se esmeran. El estadio luce sus galas. Todo es imponente, salvo el partido: un ida y vuelta incesante, con defensas ausentes, clavadas sin oposición y el único propósito de sumar puntos a granel y batir récords. Para tomar dimensión de la comodidad de las ofensivas, basta recordar el resultado del primer cuarto (53-48) o el parcial con el que se fueron al descanso (97-92, el score de un encuentro serio y parejo).
El domingo, en el Smoothie King Center de New Orleans, se quebraron dos marcas: mayor cantidad de puntos en un partido (374, con triunfo 192-182 del Oeste) y máxima anotación individual (52 puntos, convertidos por Anthony Marshon Davis). Fue la tercera victoria consecutiva
del combinado del Oeste en un juego que, año tras año, pierde rigor competitivo pero mantiene la fascinación por las estadísticas. Los 52 de Davis dejaron atrás los
42 de Wilt Chamberlain en 1962. El centro de los Pelicans levantó ante su gente el premio al jugador más valioso, luego de acertar 26 de sus 39 ensayos de dos puntos. Davis también falló cuatro intentos de triple, de modo que concluyó con un destacable 57,7% de efectividad en sus tiros de cancha. Nunca nadie lanzó tantas veces al aro en un All Star. Si hubiera metido todas, habría llegado a 90... El legendario Chamberlain metió 100 en un partido de serie regular, hazaña de la que el 2 de marzo se cumplirán 55 años.
Davis se fue feliz con su premio y, seguramente, con la noticia de que tendrá un compañero de peso en la pintura para el último tramo de la competencia. Mientras respondía preguntas de los periodistas en la zona mixta, DeMarcus Amir Cousins supo que se había concretado una múltiple operación por la cual deja Sacramento Kings y se incorpora a New Orleans Pelicans.
De este modo, compartirán plantel dos de los internos más dominantes de la liga. Davis (23 años, 2.08 metros) promedia 27.7 puntos, 12 rebotes y 2.5 tapas en la actual temporada, mientras que Cousins (26 y 2.11) registra 27.8, 10.6 y 1.3 respectivamente. Será
una de las parejas más fuertes en los tableros de la liga. Junto a Russell Westbrook, astro de Oklahoma City, Davis y Cousins son los únicos en la NBA que suman más de 25 tantos y
10 recobres por partido. Hoy el equipo dirigido por Alvin Harris Gentry aparece undécimo en la Conferencia Oeste, fuera de los puestos de playoffs, pero la lógica indica que irá hacia arriba con esta dupla originaria de la Universidad de Kentucky.