Angustia, reencuentro y llanto de los familiares en un andén de Constitución
Un tren trasladó ayer a 400 personas que estaban varadas en Olavarría, con un fuerte operativo policial.
Ayer por la mañana la llegada a Constitución del tren Roca que venía Olavarría generó gran expectativa. La formación traía a 400 asistentes del recital del Indio Solari del sábado. Los esperaban un despliegue policial, móviles periodísticos, y personas que te- nían la esperanza de encontrar a un familiar o amigo. Hubo felicidad por los reencuentros y también, angustia de los que no pudieron dar con la persona que había ido a buscar. Algunos los encontraron durante la tarde. Otros seguían esperando: es que anoche todavía había seguidores varados en Olavarría sin poder volver a sus casas (ver “Quedan...”).
La formación es la que habitualmente llega los lunes a las 7.54 desde Bahía Blanca. En su trayecto pasó por Olavarría y levantó a varios jóvenes con mucho control y sólo para los que ya tenía el ticket. La mayoría lo había comprado por lo menos dos semanas antes. Entre ellos, Héctor Antúnez (43), que contó que “el problema durante el recital se dio adelante”, cerca del escenario; “los que nos quedamos en el medio estuvimos bien".
La mayoría de los pasajeros cuestionó las graves fallas de la organización. "Creí que me moría ahí aplas
tada. Metí la cabeza en una reja para poder respirar. No teníamos forma de salir, las puertas estaban clausuradas", contó a Clarín Mariana Salontari (41) de Villa Ballester. Fue con su hijo de 17 años, ambos acostumbrados a estos espectáculos.
"Caminamos más de 50 cuadras para poder entrar. Colapsó todo, la ciu
dad no estaba preparada. No vimos seguridad en ningún lado, no había organización ni ambulancias. Nunca me pidieron la entrada", dice Salontari. "Desde que llegamos se notaba raro el ambiente. Yo tenía terror. Empezamos a salir todos. Vi a una mujer que estaba con un bebé y me fui al final de todo para ayudarla, para que pudiera salir. Después lloré todo el día, estoy defraudada".
En el otro extremo, varios fanáticos mostraron su amor incondicional al cantante. "¿Qué tiene que ver el Indio?", gritó uno. "¡Aguante los Redondos!", lanzó otro. "Siempre hay pogo", minimizó un tercero. "No tuve ningún problema, ningún inconveniente", dijo Emilse Cardozo. "Fui en familia, con los nenes y con mi marido, como siempre. Estábamos en la parte de atrás, tranquilos", aseguró.
Los andenes de Constitución estaban colmados de personas que habían ido a buscar a sus familiares, aun sin saber si venían en esa formación. “Vinimos por intuición. Él fue solo, en tren, y suponemos que va a volver en tren”, contó Miriam, quien viajó desde Isidro Casanova a buscar a su hermano, Juan Emanuel Laurito (21). Cerca de ella las lágrimas de Gladys lo decían todo: su hijo no llegó al andén. Se llama Cristian Sotelo y viajó con su amigo Ezequiel Ortiz. "No tengo forma de comunicarme. Llevó el celular, pero no sé qué pasó. Ya fue el año pasado a ver al Indio y le pasó lo mismo: el micro lo dejó varado", relató a Clarín la mujer. Durante el día, en las redes sociales allegados contaron que Emanuel y Cristian se habían contactado con sus familias.