“Por jugar así, tomando riesgos, tenemos los puntos que tenemos”
El técnico dijo que no cree que su equipo tenga grandes problemas defensivos. Hará dos cambios.
Por algo, cuando en el verano era prácticamente vox pópuli que Boca necesitaba reforzar su última línea, el sostuvo contra viento y marea que no era prioridad. Para Guillermo Barros Schelotto había otras cuestiones mucho más urgentes que acomodar la cuestionada defensa. Y el DT no se mueve de su pensamiento. Al menos, eso se desprende de sus palabras en la conferencia de prensa de ayer. Sin titubeos, el Mellizo aseguró: "Nosotros, como todo equipo, cometemos equivocaciones y por eso tenemos que trabajar, crecer, madurar. Pero no creo que tengamos grandes errores defensivos".
No dudó el entrenador, tampoco, al remarcar lo que sigue considerando un fallo innecesario aquel que le costara a Boca el partido con Talleres, en la Bombonera, donde los cordobeses se llevaron un 2-1 impensado. "Nos equivocamos al resolver una situación que era fácil y perdimos el partido", aseguró Guillermo, y sostuvo eso en lo que percibió del plantel en el regreso al trabajo, a principios de esta semana: "El martes te acercabas a los jugadores y te ibas dando cuenta de que había sido un error claro. Aparte estamos en un lugar de privilegio en la tabla. Y en Boca tenés que estar siempre arriba desde lo anímico".
Palabras que tuvieron que ver con la actuación defensiva y también con todo lo que se generó después, donde cada paso en falso del equipo parece resonar más que en cualquier otro lado, fueron las de Barros Schelotto cuando se le consultó por los cuestionamientos recibidos tras la caída como local, que le impidió al equipo de la Ribera escaparse un poco más en la punta. Porque Juan Insaurralde había sugerido con sus declaraciones que era innecesario "seguir atacando y atacando cuando se está uno o dos goles arriba" porque los defensores quedaban "desprotegidos". El técnico recogió el guante frente a la consulta y fue categórico en su respuesta: "El equipo tiene una forma de jugar clara y los defensores no quedan expuestos. Nosotros tenemos que tomar los riesgos que tiene que tomar un equipo grande, de las características de Boca. Por jugar así, tenemos los puntos que tenemos".
Y el runrún que desembocó la derrota, ya fuese en bares, charlas de café, colegios, oficinas o, claro, redes sociales tampoco pasó desapercibido. El Mellizo consideró tales críticas exageradas y hasta se rió cuando le preguntaron por su opinión sobre las mismas. "¿De verdad creen que no se dramatizó? Yo creo que, como siempre sucede en clubes como Boca, se debe haber dramatizado. Parecía que la gente no sabía que hacía quince partidos que no perdíamos".
Después de dejar entrever cierta sorpresa por la no convocatoria de Fernando Gago -al cabo, una buena noticia para sus intereses como DT de Boca-, Guillermo puso el foco en el juego de mañana, frente a San Martín. Aseguró que piensa en dos cambios: Ricardo Centurión en lugar de Oscar Benítez y Jonathan Silva por Frank Fabra, convocado a la selección de Colombi. Pero como es habitual en los entrenadores, no se animó a confirmarlos. Boca intentará recuperarse ante los sanjuaninos con unos 15 mil hinchas propios en las tribunas del Estadio Bicentenario.