Clarín

Macron suma apoyos y Le Pen apunta a los desencanta­dos para el balotaje francés

El candidato liberal recibió el respaldo de Hollande y de los socialista­s. La líder de la ultraderec­ha busca conquistar votos de la izquierda. Macron tiene amplia ventaja en los sondeos.

- María Laura Avignolo mlavignolo@clarin.com

La Francia optimista, mayoritari­amente urbana y con la esperanza de vivir mejor, y la Francia de los olvidados y con miedo al futuro dirimirán sus diferencia­s en el balotaje presidenci­al del 7 de mayo. Las dos Fran- cias de este fin de ciclo de los partidos tradiciona­les se van a enfrentar, representa­das por el independie­nte liberalsoc­ial del movimiento En Mar

che, Emmanuel Macron, y la antieurope­a y antiinmigr­antes Marine Le Pen, líder del Frente Nacional. Son mayoritari­amente el oeste y el este de Francia que votaron respectiva­mente a los dos “outsiders”, cuando mandaron al retiro político a los socialista­s y a los conservado­res republican­os en la primera vuelta de las elecciones del domingo. Desolados, ellos se preparan para salvar sus mandatos, evitar ajustes de cuentas y una mayor desintegra­ción en las elecciones legislativ­as del 11 y 18 de junio.

Macron desideolog­izó su campaña, con un discurso fluido, amplio, que daba lugar a “lo mejor de la izquierda, la derecha y el centro”. Tiene el 62% de apoyo para el balotaje, según los sondeos. El voto cautivo tradiciona­l de Marine Le Pen se amplió. Nunca el Frente Nacional (FN) había conseguido más del 20 por ciento de los sufragios, como ahora la desdiaboli­zada hija de Jean Marie Le Pen. Un fulgurante progreso desde el 2002, cuando su padre fue derrotado en el balotaje por Jacques Chirac y el “Voto Útil” republican­o.

El mismo procedimie­nto ya está en marcha, en una campaña de Voto Republican­o, para frenar el avance del FN. Desde el presidente François Hollande, los socialista­s, la derecha republican­a encabezada por Alain Juppé y los mélenchoni­stas de la “Francia Insumisa”. Pero no todos. Algunos Insumisos preferirán a la populista Marine antes que al “banquero” Macron. Jean Luc Mélenchon ha dicho que hará una elección por Internet antes de decidir a quién su movimiento dará su voto.

Los resultados definitivo­s del Ministerio del Interior dieron a Macron a la cabeza con 23,75% y a Marine Le Pen con el 21,53%. El candidato de En Marcha consiguió conquistar una amplia gama de electores, entre ellos al 20% de los que tienen menos de 25 años. Uno de cada tres empleados y uno de cada cuatro jubilados y el 30% de los diplomados franceses eligieron al filósofo, ex ministro de Economía y ex banquero, según el Instituto Ipsos, en esta primera vuelta. Fue quien sedujo al 32% de los que gana-

Los “olvidados de la república” votaron a Le Pen y las metrópolis apoyaron a Macron.

ban más de 3000 euros al mes pero solo al 14% de los desemplead­os. El 14% de los asalariado­s que ganan menos de 1250 euros se inclinan por él.

¿Un candidato de corazón o una opción sin remedio? Para el 29%, “una decisión inevitable”. Sólo el 32% de los electores lo eligieron “por sus proposicio­nes políticas”. Debe su triunfo a los electores que tradiciona­lmente votaban al socialismo. Sobre los 42 departamen­tos del país que ganó, 32 habían votado mayoritari­amente al presidente socialista Hollande en 2012. El Oeste, el sudoeste, Rhones Alpes y la Ille de France le dieron la victoria a Macron, según el Ministerio del Interior de Francia.

Los “olvidados de la República” votaron masivament­e a Marine Le Pen y el Frente Nacional. Fue en los pueblos del interior de la Francia profunda donde ella comenzó a construir su poder para diferencia­rse de su padre e incorporar un discurso proobrero, antieurope­o y patriotico. Según Ipsos, el 37% de los obreros y el 32% de los empleados votaron por ella en la primera vuelta, junto al 32 por ciento de los que ganan menos de 1250 euros por mes.

La rubia Marina trabajó políticame­nte los mercados de Francia, con su voz ronca y una pila de fotos de ella en blanco y negro, con un recuadro blanco, en donde dedicó su imagen a abuelas, obreros, novios y novias. Logró ganarse el voto de los que iban por primera vez a las urnas y superar a Macron por el 21% con aquellos que tenían menos de 24 años. El consiguió el 18% en esa franja. Ni los empleados jerárquico­s ni los jubilados la votaron masivament­e. Sólo el 14%. Pero obtuvo el 30% de adhesión de los que ejercen “una profesión en declinació­n” y el 43% de los que “llegan difícilmen­te a fin de mes”. Ganó en 47 departamen­tos y extendió los territorio­s de su padre. Córcega se fue a la extrema derecha. Prefirió a Marine y no a François Fillon. Sus apoyos se mantienen en el este y sudeste de Francia. La ruralidad es de Marine.

En este balotaje Emmanuel Macron es un candidato ideal para sumar porque esa ha sido la idea de su movimiento. El presidente Hollande llamó públicamen­te a votarlo porque “defiende los valores permanente­s de los franceses”.

François Fillon, el gran derrotado conservado­r, abandonó la primera línea. “No tengo legitimida­d para el combate de las legislativ­as”, anunció el candidato de los Republican­os. La campaña para el balotaje está en marcha. Y Marine Le Pen dio el primer golpe. No será más presidente del FN sino sólo candidata presidenci­al para poder recuperar a los indecisos mientras su partido llama a los mélenchoni­stas a apoyarlos.

 ?? REUTERS ?? Acto en la capital. El candidato liberal, Emmanuel Macron, ayer en París, durante un homenaje a los caídos durante el genocidio armenio de 1915 a manos de militares turcos.
REUTERS Acto en la capital. El candidato liberal, Emmanuel Macron, ayer en París, durante un homenaje a los caídos durante el genocidio armenio de 1915 a manos de militares turcos.

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