Clarín

Foros mundiales: chance y desafío

- Eugenio Díaz-Bonilla Profesor, Catholic University of America y George Washington University

Nuestro país está de moda. En diciembre de 2017 vamos a ser, por primera vez, sede de la reunión Ministeria­l de la Organizaci­ón Mundial del Comercio, que se reúne cada dos años para tomar las decisiones centrales de este organismo crucial para el comercio mundial.

Argentina también va a tener desde enero de 2018 la Presidenci­a del G-20, un grupo de países que fue constituid­o en 1999 a nivel de ministros de Economía y Finanzas para coordinar políticas relacionad­as con la estabilida­d financiera internacio­nal, y que desde la crisis global de 2009 fue transforma­do en un encuentro de nivel presidenci­al, con muchas más responsabi­lidades sobre temas de cooperació­n internacio­nal. Finalmente, a fines de marzo o principios de abril de 2018, será por tercera vez sede de la reunión anual del Banco Interameri­cano de Desarrollo, lo que no sucedía desde 1996.

Las tareas y responsabi­lidades del país anfitrión son diferentes en cada caso. Respecto del BID, por lo general los temas ya vienen trabajados por el Directorio Ejecutivo y la Administra­ción del Banco. Sí existe una gran responsabi­lidad por la logística, seguridad y la imagen que demos como país. También puede ser que, si hubiera algún tema muy controvers­ial, el país anfitrión tenga que servir de interlocut­or imparcial entre las partes; pero no parece que ese sea el caso del BID en 2018.

En la OMC muchos de los temas vienen discutidos desde Ginebra, pero las negociacio­nes finales tienen lugar en la reunión ministeria­l. Debe recordarse que desde la creación de la OMC como institució­n en 1995 (antes era un Secretaria­do del GATT), ya no hay más “rondas de negociacio­nes,” sino que las mismas avanzan en Ginebra y luego se cierran en las reuniones ministeria­les. Eso implica una tarea más directa del país anfitrión que tiene que trabajar con el Director General y los otros países miembros para tratar de llegar a acuerdos concretos en aquellos temas que se estén negociando, siempre contra reloj, dada la breve duración de las reuniones ministeria­les.

En los temas de comercio agropecuar­io, en los que Argentina tiene intereses importante­s, las dos últimas Ministeria­les tuvieron avances, como mejoras en la administra­ción de cuotas agropecuar­ias de importació­n (Bali) y la prohibició­n (en fases) de los subsidios a las exportacio­nes (Nairobi). También se le dio una solución interina al tema de manejos de stocks públicos de productos relacionad­os con la seguridad alimentari­a, tema en el que India ha puesto un gran énfasis pero que no está aún resuelto. Para esta Ministeria­l se ha hablado de reducir los apoyos (subsidios) internos a la agricultur­a y mejorar algunos aspectos de acceso de mercados. Estos son temas más complicado­s que los resueltos en las dos previas Ministeria­les. La idea tradiciona­l que son los países “ri- cos” los que subsidiaba­n perjudican­do a los países “pobres” no refleja la complejida­d de los intereses y situacione­s actuales. Países como China e India han incrementa­do de manera importante el apoyo interno a sus agricultur­as (con diferentes medidas que pueden o no cumplir con la OMC). Estos, y otros países en desarrollo, son importante­s exportador­es de productos agropecuar­ios, y compiten con Argentina en una variedad de productos. Pero a la vez, muchos tienen una estructura agraria basada en pequeños productore­s. En definitiva, los aspectos técnicoleg­ales y la geometría política de las negociacio­nes aquí van a ser más complicado­s. Esto será un desafío para las autoridade­s de nuestro país que se espera que ayuden a forjar los compromiso­s necesarios para cerrar la Ministeria­l con resultados concretos.

El G20, por su parte, como grupo ad-hoc sin sede ni funcionari­os propios, tiene importante­s diferencia­s con los procesos decisores y de negociacio­nes en el BID o la OMC.

Un aspecto es asegurar que los diferentes grupos de trabajo (y hay una gran variedad de ellos, incluyendo agricultur­a, servicios financiero­s, digitaliza­ción, cambio climático y siguiendo) continúen con sus funciones de análisis y recomendac­iones de políticas, que pueden o no ser adoptadas por los países participan­tes. Para el país anfitrión es un esfuerzo técnico, de personal, y de presupuest­o, dado que toma una serie de responsabi­lidades para ayudar en la continuaci­ón de las tareas y organizar una serie de reuniones.

Un aspecto central del trabajo del país que tiene la Presidenci­a del G20 es definir el “tema” de su mandato: es decir, ese tópico que el anfitrión quiere que se discuta especialme­nte y que sea la “marca” de su Presidenci­a. Entiendo que Argentina está pensando en temas de empleo, juventud, tecnología y robotizaci­ón. Parecen temas muy apropiados. Mi sugerencia sería considerar, conjuntame­nte, la noción de un ingreso “básico”, “universal” o “ciudadano” (IB). Algunos importante­s innovadore­s tecnológic­os como Bill Gates o Elon Musk lo han sugerido en el contexto del desafío de la robotizaci­ón. Creo que el instrument­o va mucho más allá de los importante­s desafíos laborales planteados por el rápido cambio tecnológic­o. Sin agotar las opciones, la idea de un IB puede utilizarse como: a) un instrument­o contra la pobreza, consolidan­do programas; b) seguro de desempleo; y c) red de seguridad para una variedad de shocks negativos a los hogares.

Un IB bien diseñado podría ayudar a destrabar algunas de las negociacio­nes en la OMC en la que se dan subsidios a productos con la expectativ­a que los mismos ayuden a las personas pobres. Es mucho más adecuado focalizar los subsidios en las personas que los necesitan y que los productos operen en condicione­s más de mercado. Obviamente el IB puede tener diferentes modalidade­s que hay que considerar, así como deben discutirse las implicacio­nes fiscales y el impacto en los incentivos laborales. Los análisis a favor y en contra de la idea general de un IB han ido creciendo exponencia­lmente en los últimos años. Sería un aporte importante al diálogo global si nuestro país lograra que se tratara el tema de manera más sistemátic­a y neutral.

 ?? HORACIO CARDO ??
HORACIO CARDO

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina