Una carrera que determinará a quién salpicará primero el caso
En la carrera por conseguir la lista de los funcionarios que cobraron 35 millones de dólares en coimas de Odebrecht se observa un claro énfasis de la Procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, porque lleguen primero desde la Justicia de Brasil los datos sobre el jefe de la AFI, Gustavo Arribas, que los eventualmente referidos al ex ministro de Planificación Julio De Vido. El orden en que llegará la información no es inocente por el impacto mediático que tendrá ahora que arrancó la campaña electoral. La jefa de los fiscales negocia para que el arrepentido cambista Leonardo Mei- relles mande lo más pronto posible las cuentas bancarias en las que afirma depositó "850 mil dólares" para Arribas.
Mientras desde el Gobierno se confirmaba ayer que el procurador general de Brasil empezará a enviar los datos a partir del 1° de junio, cuando vencerá el acuerdo de confidencialidad con Odebrecht, voceros de Gils Carbó salieron a decir que “hasta ayer no fuimos notificados oficialmente” del comienzo del envío de esa información sensible.
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, sin vueltas, acusó a Gils Carbó de “dilatar” la cooperación judicial con Brasil, mientras el Gobierno ha mandado una serie de mensajes al gobierno brasileño para que se agilice el destape del escándalo de los 35 millones de dólares. Todo en el marco de un gobierno que impulsa el juicio político de Gils Carbó en el Congreso para lograr su destitución. El oficialismo cree en la inocencia de Arribas y sobre todo en "la desmesura" de comparar las sospechas en su contra con las de De Vido, quien manejó todos los contratos de obra pública nacional entre el 2003 y el 2015.