Piden procesar a 5 acusados por el crimen de Araceli
Lo hizo la fiscal del caso, que además dejó libres a otros tres imputados. La familia apelará.
La fiscal de San Martín Graciela López Pereyra pidió ayer la prisión preventiva para cinco de los detenidos por el crimen de Araceli Fulles (22). Entre ellos, Darío Badaracco, el principal acusado. A otros tres imputados se les dictó la falta de mérito y quedaron libres. Ahora el juez Martín Porto tiene cinco días para resolver la situación de los imputados, acusados de “homicidio agravado por femicidio y por la participación de dos o más personas”.
La decisión de la fiscal está relacionada con los resultados de las pruebas genéticas que se hicieron el 9 de mayo último, a partir de las muestras de ADN obtenidas del cuerpo de la víctima y de otras evidencias recolectadas en la causa, como una campera manchada, un billete, precintos y unas bolsas.
Los perfiles genéticos de los ocho detenidos fueron cotejados con esas muestras y, con estos resultados, la fiscal pidió la prisión preventiva para Darío Badaracco (29); su hermano, Hernán Alberto Badaracco (38); Carlos Damián Cassalz (34); Marcelo Ezequiel Escobedo (37); y Hugo Martín Cabañas (46). Los últimos tres trabajaban junto al principal acusado en un lavadero.
Los tres liberados son los hermanos Jonathan Rubén Ávalos (29) y Emanuel Ávalos (25), y Marcos Antonio Ibarra (38). Según trascendió, los abogados defensores de la familia de Araceli apelarán la liberación de Emanuel Ávalos. “El estuvo con Araceli en las horas previas a la desapari-
ción y mantuvo relaciones con ella. Hay tres testigos que dijeron que lo
vieron en una fiesta, pero esa fiesta fue a sólo cuatro cuadras de la casa de ella y no es motivo para desvincularlo del hecho”, dijo Verónica Molina, abogada de la familia de la chica.
Araceli fue vista por última vez en la madrugada del 2 de abril y su cuerpo fue hallado el 27 de abril debajo de unos escombros, en el patio de la ca
sa de Darío Badaracco, en Alfonsina Storni 4477, de José León Suárez. La autopsia determinó que murió por “asfixia mecánica”.
Badaracco declaró tres veces como testigo antes de ser imputado; la última vez, el mismo día del hallazgo del cuerpo. Pero su pedido de detención se demoró y, cuando salió, se mantuvo prófugo un día entero, hasta que en la noche del 28 de abril fue detenido detrás de la villa 1-11-14 del Bajo Flores porteño, gracias a una vecina que lo reconoció por la calle.
La mujer de Badaracco, Claudia Guzmán, reveló que en el sitio donde fue hallado el cadáver tenían planeado “hacer una losa” para mudarse a esa parte de la casa, y que por ese motivo el día anterior al hallazgo del cuerpo había hablado “para buscar un albañil por ese tema”. La sospecha de los investigadores es que esa iba a ser la sepultura final de la chica.