Peajes: Abertis desiste de un juicio en el Ciadi y obtiene más años de concesión
Se trata de un reclamo por US$ 872 millones. A cambio, invertirá 250 millones de dólares en futuras obras viales.
Un problema menos. El grupo español Abertis, accionista de la sociedad que controla el acceso Oeste, levantará el pleito que le hizo al país en el
Ciadi, el tribunal internacional para resolver conflictos entre países y empresas. A cambio, recibirá una extensión en el plazo de la concesión.
El acuerdo fue alcanzado entre la empresa y Vialidad Nacional, a cargo de Javier Iguacel.
La compañía desistirá de una demanda de US$ 872 millones (US$ 1.793 millones si se incluyen a socios), mientras que se compromete a invertir US$ 250 millones. A su vez, Viali- dad le reconoce un valor de US$ 247 millones, que puede recuperar a través de los ingresos que obtendrá en un mayor plazo de concesión. Autopista del Oeste cobra hasta $
55 por auto que pasa, pero no recibe el total de ese importe.
Una parte sustancial (casi $ 24) van a un fondo de asignación específica, llamado RAE. Ese instrumento, que fue inventado por el kirchnerismo y que genera sospechas sobre su utilización, será discontinuado.
A partir de ahora, el concesionario cobrará tarifa plena, más los ajustes que se vayan dando por inflación.
“El Estado venía incumpliendo desde hace 16 años. Primero, con la pesificación. Luego, con no haber puesto en práctica un acta-acuerdo del gobierno anterior (en 2006). El concesionario decía que es dueño de algo que vale US$ 872 millones, mientras que nuestros estudios demuestran que es de US$ 247 millones. Llegamos
a una solución, levantan la demanda y hay un compromiso de inversión nuevo para más obras”, puntualizó Iguacel.
Tras la revisión de Vialidad, se determinó que a la autopista del Oeste le faltan US$ 272 millones para recuperar su inversión.
Pero como poseía deudas por US$ 25 millones, esa valuación bajó a US$ 247 millones.
La situación de las autopistas heredada por el Gobierno obligó a cambios inmediatos. •
Los concesionarios de la Panamericana y Acceso Oeste hicieron juicios. •
El tramo Ezeiza-Cañuelas se lo quedó una empresa de Cristóbal López, en una operación que Vialidad sospecha que fue ilegal y está tratando de modificar.
La autopista a La Plata pasó a la órbita provincial, pero también quedan reclamos pendientes.
“Acá hay un reconocimiento económico al concesionario, con la obligación de que concreten una serie de obras. El plazo de la extensión de la concesión depende de la cantidad de automovilistas que pasen. Si se incrementa rápido, el concesionario habrá recuperado su inversión en 2026. El acuerdo es que tienen tiempo hasta 2030. Pero con el control que hará Vialidad, sabremos en qué momento alcanzarán el monto de dinero que reclamaban”, explica Iguacel.
La autopista del Oeste comenzó su explotación en 1998, con tarifas ajustadas por un índice.
En 2002, con la devaluación del peso y la pesificación de las deudas, se declaró la emergencia económica y se incumplió el contrato. Muchas empresas extranjeras recurrieron a demandar al país en los tribunales del Ciadi.
En 2006, se hizo una renegociación parcial, que no se cumplió. En 2012, se crearon los recursos de asignación específica (RAE). Vialidad le indicaba a los concesionarios qué debían hacer con ese dinero. Aunque lo cobraban, el organismo estatal decidía el curso de esos fondos.
“El manejo de los RAE era discrecional. Y hay casos, como el de López, donde el concesionario se quedaba con los RAE”, detalla Iguacel.
Abertis, el accionista mayoritario de la sociedad que controla la Autopista del Oeste, inició un juicio en el Ciadi en 2016 por todas las irregularidades antes detalladas. Desde allí, se comenzó a negociar y ahora hay un consenso para que se desistan de las demandas entre las partes.
Vialidad y el concesionario girarán el convenio acordado a la Procuración General del Tesoro, la Sigen y luego al ministerio de Transporte. Cuando pase esas instancias, será homologado. Además de Abertis, una empresa malaya posee el 20% de la empresa. El fondo de Garantía de Sustentabilidad de ANSeS tiene un 21% de la compañía, que heredó de la estatización de las AFJP. El resto está en la Bolsa.