Clarín

Cristina habló como si fuera candidata y criticó muy duro a Macri y Vidal

Convocó a una multitud en Avellaneda y fue la única oradora. Llamó a “ponerle límites” al gobierno de Macri. No quiso confirmar si estará en las listas, que cierran el sábado.

- Pablo Ibáñez pibanez@clarin.com

Fue la única oradora en el encuentro en el estadio de Arsenal, en Sarandí. Presentó el frente Unidad Ciudadana, con el que irá a las elecciones. Y golpeó sobre las políticas económicas y sociales del macrismo. Fue un acto con estilo similar a los que utiliza el Pro, sin banderas, sin bombos y con testimonio­s de personas. Le gritaban “senadora” pero ella no dio señales de si se será candidata. “Yo me sumo al espacio como una más”, dijo.

Sola, de pie en medio de un escenario-isla, Cristina Kirchner escuchó en silencio y con una sonrisa, cómo un estadio desbordado la pedía, en dos ocasiones, que se lance como candidata. "Cristina senadora", fue el coro que sonó en la cancha de Arsenal, en Avellaneda, donde presentó en sociedad Unidad Ciudadana, la marca post PJ con que -todo indica- competirá en provincia de Buenos Aires.

A días del cierre de listas -el plazo vence el próximo sábado- , la ex presidenta volvió ayer a pararse frente a una multitud leal (su último acto grande fue el 13 de abril en Comodoro Py, luego de declarar) y machacó sobre un punto: "frenar el ajuste" de Mauricio Macri.

Evitó confirmar o negar que vaya a ser candidata. En la galaxia K, donde conviven peronistas y silvestres, se da por hecho que encabezará la boleta. En el mano a mano, la ex presidenta se lo confirmó a varios caci

ques. Sus militantes, que desbordaro­n el estadio, reclamaron una definición. "Cristina senadora" cantaron durante varios minutos. "Yo tuve todos los cargos y los honores" les respondió. "Una más y no jodemos mas" insistiero­n, a capela, sus seguidores. "Vengo a sumarme como una más, a poner el cuerpo, la cabeza y el corazón", los calmó.

"Ella quería que el acto sirva para plantear la necesidad de ponerle un límite a Macri, no para avisar que será o no candidata", contó a Clarín un dirigente de vínculo directo y diario con la ex mandataria. Ese fue el foco: además de los "diálogos" con el estadio sobre la candidatur­a, la ex presidenta orientó su discurso (breve respecto a otros: duró 25 minutos) a pegar sobre los tarifazos, el endeudamie­nto y los despidos.

"Los números no dan, en las economías y en los hogares, en los comercios, en las empresas pyme, los números no dan", dijo. Y potenció el carácter plebiscita­rio de la votación de este año: "Son elecciones legislativ­as donde la sociedad expresa si está o no de acuerdo con un gobierno”.

Fue, hasta acá, el grito público más orientado hacia la polarizaci­ón y una senda que la ex presidente transita desde su regreso, en abril de 2016, cuando habló de un frente ciudadano que exprese a los que están "peor que antes". “Cómo nos pueden decir que se van a endeudar por 100 años? ¿Donde se ha visto?" castigó sobre una las últimas y más discutidas medidas de la Casa Rosada. También le apuntó a la gobernador­a, María Eugenia Vidal: “Podrás tener coaching, podrás guio

nar los discursos, podrás poner carita de buena, a mi no me salió nunca, pero esta es la realidad que tenemos que enfrentar”.

Ayer, en Arsenal, despegada del racimo de intendente­s PJ y dirigentes K -que se amucharon en una platea-, Cristina reforzó esa carta: no solo habló de "frenar el ajuste" sino que jugó con la variable pasado-futuro a la que

apuesta la Casa Rosada.

““Necesitamo­s ponerle un límite a este gobierno en las próximas elecciones. Quieren hablar del pasado, y claro que tenemos pasado, pero con ellos no tenemos futuro" ensayó un eslogan de campaña y preparó la escena final de su acto de lanzamient­o

sin lanzamient­o: nombró e hizo subir a 21 personas que, detalle, fueron afectadas por medidas de Macri.

Ex becarias del Conicet, una pareja de discapacit­ados a la que le retiraron la pensión, un universita­rio que perdió el plan Progresar y empresario­s que, enumeró Cristina, sufren el tarifazo, la baja de la actividad o la apertura de importacio­nes. Docentes, horticulto­res, cooperativ­istas y dueños de pymes desfilaron por el escenario y posaron, al final, en una foto que pretende simbolizar la "unidad ciudadana".

La puesta escenográf­ica de Arsenal tuvo ese objetivo: ponerle "nombre y rostro a cada una de las medidas de Macri", explicó uno de los operador que estuvo en la organizaci­ón.

Ese diseño político y electoral, que la semana pasada prescindió del PJ como partido, ayer avanzó un escalón más: relegó a los dirigentes (no hubo, como en otros actos, un escenario para los invitados VIP) y archivó las identidad partidaria­s.

La ex presidenta ingresó al estadio a las 14.58, escoltada por Oscar Parrilli. Dentro y fuera del estadio reunió a unas 30 mil personas. Cuando decidió hacer el acto, hace quince días, el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, le propuso reservar la cancha

de Racing, pero la ex presidente prefirió un estadio más pequeño.

 ?? AP ?? Puesta en escena. Cristina Kirchner en el escenario montado en la cancha de Arsenal de Sarandí, ayer, junto a los “ciudadanos” afectado por las políticas del macrismo.
AP Puesta en escena. Cristina Kirchner en el escenario montado en la cancha de Arsenal de Sarandí, ayer, junto a los “ciudadanos” afectado por las políticas del macrismo.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina